El agresor, este lunes, en el banquillo de la Audiencia de Palma.

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El hombre que intentó matar a su compañero de piso con unas tijeras de cocina en un domicilio de La Soledat se presentó ayer en la Audiencia de Palma embutido en un chándal Adidas y con una melena larga y canosa como la de Rosendo. Tres policías nacionales le custodiaron, esposado, hasta los calabozos del edificio. El acusado, en prisión desde que ocurrieron los hechos, no quiso declarar y se limitó a aceptar una condena de cinco años de cárcel.

El agresor se declaró culpable de un delito de tentativa de homicidio y tendrá que indemnizar al perjudicado con 9.164 euros por las lesiones y secuelas ocasionadas. No podrá acercarse a su compañero de piso en los próximos diez años.

Drogas

La agresión se produjo en torno a las 16.00 horas del 6 de septiembre. El acusado, español de 48 años, mantuvo una discusión por un asunto de drogas con su compañero de piso, de 40 y la misma nacionalidad, en la planta baja que ambos compartían en la calle California. En el transcurso de la riña, cogió unas tijeras y se las clavó a la víctima en el pecho y el cuello. Los vecinos escucharon gritos y llamaron a los servicios de emergencias. La Policía Nacional y la Policía Local acudieron al lugar y encontraron a un hombre sangrando. A consecuencia del ataque, el perjudicado sufrió una perforación en el pulmón derecho de 7,2 centímetros de profundidad.

La Fiscalía reclamaba al principio del proceso judicial una condena de siete años y medio de prisión, pero ayer rebajó su petición tras alcanzar un acuerdo con la abogada defensora del acusado, Belén Porcel.