Le pidió el móvil a una compañera de trabajo con la excusa de cambiar unos precios a unos productos en la tienda de electrodomésticos de Palma donde ambos trabajaban. Una vez que la mujer se lo prestó se marchó a un de los aseos del establecimiento.
Allí descubrió que había vídeos de su compañera manteniendo relaciones sexuales con su novio y se los envió a su propio móvil a través de WhatsApp. La perjudicada se percató de lo ocurrido y denunció los hechos, que tuvieron lugar en octubre de 2019.
El hombre, de nacionalidad española, había incurrido en un presunto delito de descubrimiento y revelación de secretos. La Fiscalía solicita para él una pena de tres años de prisión, 3.600 euros de multa y que indemnice a la perjudicada en otros 2.000 los daños morales ocasionados. El juicio se celebrará a principios del año que viene en una sala de lo Penal de Vía Alemania.
Precios
Tal y como relata el ministerio público en su escrito de acusación, el imputado y la perjudicada eran compañeros de trabajo. La mañana del 10 de octubre del pasado año el joven le pidió a la chica su móvil para poder modificar desde el terminal el precio de unos productos de la tienda. Esa era la excusa. Con el teléfono en la mano se marchó a uno de los baños de la tienda del establecimiento y allí comprobó que su compañera se había grabado vídeos sexuales con su novio. Esas imágenes acabaron en el WhatsApp del imputado. La Fiscalía sostiene de que no hay constancia de que esos vídeos se reenviaran a terceras personas.
La perjudicada se dio cuenta de lo ocurrido y denunció a su compañero ante la Policía Nacional. Asimismo la chica comprobó que el móvil tenía la pantalla fracturada, desperfecto que se produjo mientras su compañero estuvo metido en el aseo con su teléfono.
10 comentarios
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Otra vez español...
A mí me huele a otro caso de denuncia no falsa. Maremeeeeeva.
Que ideas tiene la gente! Grabando softporn, dejándolo en el móvil y prestando eso a otros... lo que haces en casa debe quedarse alli.
Además de tener el teléfono la pantalla fracturada, ¿no tenía máculas?
Cómo se dio cuenta???
Estoy con Viven. No entiendo para que hace falta el teléfono para cambiar precios. Como lo de la pantalla. Pero más aun, si yo decido robar videos porno de mi compañera de trabajo, no trataría de cubrir mi rastro? No se. Raro como dice el compañero
Como a Vivien, me parece muy extraño, que tenga vídeos sexuales en el móvil y le se lo deje, sabiendo que puede tener acceso a ellos y luego le denuncie y pida una indemnización. Él hizo mal, pero el comportamiento de ella, raro, raro. Si hubiera sido al revés y una mujer compartiera vídeos sexuales de un hombre, ¿podría el hombre denunciar? Si lo hiciera, ¿se le reirían en la cara???
Gracias,por informar nos..)
Algo no me cuadra, el móvil de la compañera para modificar unos precios? Se lo lleva al WC? Sabe que hay imágenes eróticas? Se le cae el móvil?... Muy extraño, muy extraño cuando menos.
Después pactan, él se conforma y le rebajan la condena. Y, él a reirse de otra y de la Justicia.