Desmantelado uno de los mayores centros de distribución de juguetes y productos sanitarios ilegales de Madrid. | Youtube: Policía Nacional

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La Policía Nacional, la Policía Municipal de Madrid y la Agencia Tributaria han detenido a doce personas relacionadas con uno de los mayores centros de distribución de juguetes y productos sanitarios ilegales de Madrid, donde había 1,3 millones de artículos para niños y 2,7 millones de mascarillas.

En la Operación Abies han sido incautados 1.352.785 juguetes falsificados y 2.727.946 unidades de productos sanitarios, y los agentes han arrestado a doce personas e imputado a otras ocho, según han informado este viernes la Policía Nacional y la Policía Municipal de la capital.

Los ahora detenidos habrían conseguido, según los primeros cálculos hechos por los investigadores, más de 6,8 millones de euros de beneficio con los juguetes y más de 2,7 millones con los productos sanitarios.

Este dispositivo se ha llevado a cabo coincidiendo con la proximidad de las fiestas navideñas y la primera fase fue realizada por los agentes municipales que practicaron varios registros en la capital para identificar estos productos fraudulentos en diversas tiendas y los requisaron.

Se trataba de establecimientos de tipo bazar que exponían al público juguetes de reconocidas marcas, como Disney, Lego o LOL Surprise, en los que se intentaba imitar o simular sus identificativos y diseños industriales, ha detallado la Policía Municipal.

En la segunda fase los investigadores identificaron a los integrantes del grupo criminal, que tenía su punto neurálgico y centro de distribución y fabricación en una nave ubicada en la localidad madrileña de Pinto.

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La banda compraba los productos en China y, una vez introducidos en el mercado español fraccionados por piezas, a través de diferentes medios, eran montados principalmente en la nave de Pinto para, posteriormente, distribuirlos a diferentes puntos de venta del polígono Cobo Calleja, en Fuenlabrada.

Además, ejercían de proveedores de esos mismos productos a otros vendedores de diferentes puntos del país.

En el establecimiento, abierto al público, los comerciantes disponían de la cantidad justa para responder a la demanda diaria.

En el caso de no contar con la existencia necesaria, o ante un pedido de grandes dimensiones, contaban con un equipo de transporte y recogida que se desplazaba a las naves de almacenamiento para conseguir el producto necesario.

Según los investigadores, la gran cantidad de material que tenían hace imposible, de momento, establecer una cuantía exacta de los beneficios que habrían obtenido, estimando que, a la baja, el promedio de la ganancia por juguete ronda los cinco euros.

Esto supondría más de 6.810.000 euros, mientras que el promedio de ganancia por producto sanitario ronda el euro, lo que aportaría un beneficio total de 2.727.946 euros.
Además de los juguetes y los productos sanitarios, se han intervenido 19.300 euros en efectivo.

En esta operación también han participado los inspectores del Área de Consumo y Calidad de la Comunidad de Madrid, que han identificado y certificado las diferentes disfunciones y riesgos para la salud que había en los diferentes productos localizados.