El acusado, de 31 años, negó en el juicio que agrediera al hombre y aseguró que lo acompañó fuera del chalet porque estaba muy borracho y no quería irse. Explicó que se cayó solo por las escaleras de acceso al prostíbulo.
El juez no se cree su versión. «Suponiendo que fuera cierta la tesis de que solo hubo una caída accidental, no parece que un prostíbulo sea el mejor sitio para fabular los hechos de una denuncia».
La sentencia declara probado que la agresión se produjo sobre las 13.30 horas del 6 de septiembre. La madame del club de alterne llamó a su hijo tras una discusión entre el cliente y una de las prostitutas. El acusado acudió al local junto a otra persona que no ha sido identificada y, una vez allí, empezaron a discutir con el hombre.
El cliente no quería abandonar el chalet y el hijo de la madame le dio varios puñetazos hasta que lo sacó del establecimiento tirándolo por los escalones que daban acceso al inmueble.
La víctima se levantó como pudo y se encontró a un antiguo compañero de trabajo que le atendió y llamaron a la Guardia Civil. A consecuencia de la agresión, el hombre sufrió una fractura en la clavícula izquierda, así como contusiones, hematomas en los brazos y una fractura en uno de los dedos del pie.
El herido precisó de tratamiento ortopédico para inmovilizar la clavícula durante dos meses y tuvo que ir a rehabilitación. El agresor deberá indemnizarle con 10.901 euros por las lesiones ocasionadas.
3 comentarios
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que vida más triste, depender de un prostíbulo. teniendo internet.
¿Cuánto tiempo le van a durar los 10.900€ al "cliente"? ¿En qué se los va a gastar?
el cliente siempre tiene la razón,...