Una mujer embarazada pierde su hijo en un tiroteo en Sabadell

Tres mujeres y dos hombres resultaron heridas, dos de ellas de gravedad, en un tiroteo ocurrido sobre las 01:30 horas en la calle Serra Galliners de Sabadell, un polígono industrial y comercial de la localidad en el que se estaba celebrando una fiesta en la vía pública.

Sobre esa hora, una persona abrió fuego contra las víctimas, provocando además la estampida de los congregados en esta vía que termina en una especie de descampado, según han confirmado a Efe varios testigos.

Los Mossos d'Esquadra investigan si el presunto autor del tiroteo había tenido una relación sentimental con una de las mujeres atacadas, con lo que, de confirmarse, podría tratarse de un caso de violencia machista, según han confirmado a Efe fuentes cercanas al caso.
A consecuencia del tiroteo, una mujer en avanzado estado de gestación ha perdido a su hijo, a pesar de que fue operada de urgencia en el Hospital de Terrassa (Barcelona), sin que los sanitarios pudiesen salvar la vida del feto.

Otra de las víctimas del tiroteo, un hombre, resultó también herido de gravedad, aunque fuentes policiales explican que no se teme por la vida de ninguno de los heridos en este suceso.

Los Mossos recibieron el aviso del tiroteo sobre las 01:30 horas, y hasta el lugar de los hechos se trasladaron varias unidades de la policía catalana y de la policía local, además de tres ambulancias del Sistema de Emergencias Médicas (SEM), para atender a los heridos.

El Área de Investigación Criminal (AIC) de los Mossos d'Esquadra de la Región Policial Metro Norte ha abierto una investigación para esclarecer las causas de este tiroteo, aunque el móvil sentimental cobra fuerza, y para detener al autor de los hechos.

Varias testimonios que se encontraban de fiesta en el lugar del tiroteo han explicado que, en un primer momento, se escucharon tres tiros, aunque algunas personas llegaron a pensar que eran petardos, lo que provocó que la gente saliese corriendo en dirección al descampado.

Poco después, relatan estos testimonios, se escucharon otros seis o siete tiros más.
Estos jóvenes que se encontraban de fiesta explican que, después del tiroteo, vieron a una persona herida con «la espalda ensangrentada» por un impacto de bala caminando hacia el descampado donde, finalmente «se desplomó».