Imagen de la penúltima detención de los dos delincuentes.    | CNP

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En la Platja de Palma se sienten como en casa. Hacen y deshacen a su antojo a la hora de delinquir. Se sienten casi impunes. Tanto les da por desvalijar una veintena de coches estacionados  como por apalizar a un turista para robarle. La Policía Nacional detuvo ayer de madrugada acusados de un robo con violencia a dos activos ladrones, un marroquí y un español, apenas unos días más tarde de ser apresados por destrozar vehículos para sustraer todo tipo de objetos.

Los hechos, tal y como apuntan fuentes judiciales, se remontan a las 2.15 horas del lunes. Un recepcionista de un establecimiento hotelero de la Platja de Palma, que se encontraba fumando en la puerta del mismo, observó cómo un coche ocupado por dos hombres perseguía lentamente a lo que parecía un turista ebrio. Memorizó la matrícula y segundos más tarde, desde donde ya no le alcanzaba la vista, escuchó gritos. Su inquietud le hizo ponerse en contacto con un colega de un hotel cercano para contarle lo que había visto y oído. Este le confirmó que uno de los clientes había aparecido en recepción sangrando y balbuceando, dado su estado de embriaguez, que dos hombres le habían golpeado para robarle y se habían marchado a toda prisa subidos en un vehículo. El empleado avisó de inmediato a la Policía Nacional.

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Una patrulla ‘zeta' se entrevistó en el hotel con el perjudicado y les relató que le habían robado los dos hombres el teléfono móvil y unos 100 euros que portaba encima. El germano acabó con puntos de sutura en la cabeza y en el labio. El empleado del hotel próximo le dio la matrícula y el modelo del coche de los sospechosos y se inició su búsqueda.

Uno de los vehículos policiales se topó con los delincuentes circulando con en un Peugeot blanco en la zona de Es Pil·larí. En ese momento y tras situarse sigilosamente tras ellos le lograron dar el alto cerca del Estadi Balear. En el registro del coche hallaron escondidos un terminal móvil y 100 euros. No había la menor duda de que los sospechosos tenían algo que ver con el violento asalto al turista germano y quedaron arrestados.

Era su segunda detención en apenas cinco días. El miércoles ya fueron apresados como presuntos autores de 23 robos con fuerza en vehículos aparcados en la Playa de Palma y horas más tarde el juez de guardia ordenó su puesta el libertad. Ambos acumulan un sinfín antecedentes policiales y judiciales por delitos similares.