No se trataba de un hecho aislado. Por su parte, el colegio donde la pequeña cursa estudios también envió un informe a la policía, manifestando que tenían constancia de que la menor era agredida por su madre. Una vez que la UFAM (Unidad de Atención Familia Mujer) de la Policía Nacional recibió la denuncia tanto de la educadora social del centro de acogida donde viven y del propio colegio, se procedió a la detención de la presunta autora por un delito de malos tratos en ámbito familiar. Tras la investigación, se determinó que la progenitora agredía habitualmente a su hija y ella intentaba zafarse subiéndose a la cama de arriba de la litera donde residen.
La madre en la habitación de residencia, apagaba las luces una vez que le agredía para evitar ser descubierta, además de golpearla con la mano abierta. Los hechos se han llevado a cabo durante un tiempo prolongado, sin que se haya podido precisar con exactitud cuándo comenzaron. Además su hermano pequeño también ha sido agredido en varias ocasiones, lo que menos veces que su hermana mayor, ya que con los gritos y llantos del pequeño alertaban al personal del centro de acogida. Durante la investigación del caso, también tuvo constancia de que otra hija que tenía la madre, hace escasos meses, le quitaron la tutela por hechos similares. Además se manifiesta que la presunta autora amenaza a sus otros dos hijos para el momento en que puedan tener una casa independiente, les podrá agredir más ya que no estarán en ningún centro.
