Imagen de Cala Varques. | ARCHIVO

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Cala Varques fue durante décadas la cala virgen favorita de los manacorins, la imagen perfecta para la promoción del municipio; también ha sido la viva estampa del caos y la imagen de la masificación turística; y escenario de múltiples accidentes. Un punto negro en la Isla de accidentes provocados por practica el psicobloc o lanzarse al agua desde las rocas. El último accidente, ocurrido este fin de semana, se ha cobrado la vida de un turista estadounidense de 26 años, que se lanzó al mar desde 12 metros de altura. A veces la ignorancia puede ser muy peligrosa.

Ya en 2012, el Consistorio de Manacor prohibió la práctica del psicobloc en esta cala virgen para evitar accidentes; también se colocaron carteles advirtiendo del peligro de saltar desde lo acantilados y de las multas por saltarse la normativa. De poco sirvieron. Sin socorristas en la zona, y con una media de 500 visitantes en temporada alta, los vídeos en redes sociales mostrando sus saltos y 'proezas' varias se encuentran con solo hacer una búsqueda. ¿Qué hay que hacer para evitarlo? Ahí radica el problema.

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El caso del estadounidense fallecido ha sido el primer precipitado muerto del año, lamentablemente no será el único. Y eso que el verano pasado fue el primero año en que una lancha con dos socorristas vigiló por primera vez todas las playas vírgenes de Manacor, desde mayo hasta finales de octubre. Aún así, no pudieron evitar que durante el mes de junio un menor de 17 años sufriera un accidente al lanzarse desde 15 metros de altura. No falleció gracias a la ayuda de su hermano, que le ayudó a salir del agua.

En 2019, por ejemplo, se produjo otro grave accidente. En este caso fue una joven de nacionalidad danesa, que tras saltar de un acantilado en el arenal, se golpeó la espalda. Fue necesario evacuar a la joven de forma urgente a un centro médico, debido a la gravedad de las lesiones que presentaba. Según la Unidad Territorial de Costas (UTC) de la Policía Local de Porto Cristo y las ambulancias del 061, cada verano atienden una decena de accidentes; el de este fin de semana ha sido el primero, veremos si no es el último.