Pau Rigo, el anciano acusado de matar a uno de los asaltantes de su chalet, en la Audiencia de Palma. | Alejandro Sepúlveda

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Asustado y nervioso. Y también malherido. Así encontró la primera agente de la Guardia Civil en llegar al lugar de los hechos a Pau Rigo, el anciano de Porreres que acabó con la vida de uno de los asaltantes de su chalet en febrero de 2018. «No paraba de decir que su mujer estaba dentro escondida», ha relatado la funcionaria ante el tribunal del jurado.

Esta misma guardia civil también se topó nada más acceder al lugar a Mauricio, el ladrón que acabó falleciendo. «Lo encontré boca arriba y sangrando. Estaba vivo y quería una ambulancia. No podía articular palabra, no pudo decir nada», ha remarcado.

Uno de los investigadores, en una extensa declaración, ha remarcado que tanto Marcos como Fredy tras ser detenidos y en la toma de declaraciones situaron a 'Pep Merda' como el ideólogo del asalto al chalet. «Ambos fueron creíbles en sus manifestaciones y no dudaron en decir que Pepe era quien había planeado todo», ha dicho. Asimismo también ha explicado que los dos facilitaron con sus declaraciones el esclarecimiento del caso.

Otro de los testigos que ha desfilado este jueves, en la cuarta sesión de la vista, ha sido un amigo de Marcos y Fredy, el que los puso en contacto. «Yo trabajaba en la obra con Marcos y me pidió que si conocía a alguien para trabajar cuando le dije que yo me iba. Y pensé en Fredy, al que conocía del instituto». El varón ha desmentido saber si la intención de Marcos era otra con el colombiano.