La policía investiga a tres hombres que salieron huyendo tras el derrumbe de El Terreno | ALEX SEPULVEDA

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Agentes de la UCRIF de la Policía Nacional investigan a tres hombres, de origen sudamericano, que tras producirse el derrumbe de la vivienda de tres plantas en la barriada de El Terreno de Palma, salieron huyendo del lugar. Instantes después, una patrulla de la Policía Local de Palma que acudió al lugar los interceptó dándose a la fuga, llenos de polvo y con magulladuras por el rostro. Acto seguido, los tres sospechosos fueron entregados a sus compañeros de la Policía Nacional para que se hicieran cargo de la investigación.

En un primer momento, estos hombres dieron una versión muy pobre y llena de contradicciones. Ellos reconocen que accedieron a la vivienda afectada con la intención de llevarse la chatarra que había en su interior. Es decir, trataron de justificar su presencia dentro de la obra alegando que no tenían nada que ver con la empresa de construcción y que estaban allí por casualidad recogiendo metal para venderlo. Los agentes responsables del caso tienen serias dudas y sospechan que podría tratarse de trabajadores que se encontraban en situación irregular y sin contrato alguno. Por ese motivo, también se ha dado parte a Inspección de Trabajo, al juzgado de instruye el caso y al resto de organismos competentes en la materia.

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Según los expertos, el derrumbe sufrido el interior de una vivienda de tres plantas de la barriada palmesana de El Terreno, concretamente en la calle Polvorín, podría haber encontrado dos argumentos para justificarlo en el hecho de que la vivienda estaba en obras, como indicaban carteles señalizadores en el exterior de la misma, a lo que se podrían haber unido las importantes precipitaciones caídas ese mismo lunes en la capital balear. La vivienda, cuya cubierta se desplomó, habría sido afectada por un colapso de su estructura, provocando que cediera parte de la misma y la cubierta.

Un informe del arquitecto municipal del Ajuntament de Palma prohíbe volver a sus viviendas a los vecinos del edificio derrumbado de la calle Polvorín 7 pero también a los residentes de los inmuebles afectados, que se sitúan en la calle Polvorín 9 y Robert Graves 94.