Lo de las motos, en realidad, era lo de menos. O la fachada. Bajo esas chupas de cuero y las Harley Davidson se escondían, en realidad, una banda de forajidos que seguían anclados en el Lejano Oeste. De Alemania tuvieron que huir porque la Polizei no se andaba con chiquitas y día sí y otro también llevaban a cabo redadas y detenciones. Como se sentían poco queridos en su tierra, los rudos moteros cambiaron a otros aires más cálidos. Y ahí entra en escena nuestra Isla, un imán en ocasiones - o casi siempre- para los más desviados del rebaño.
Durante los primeros meses montaron su infraestructura y explotaron los prostíbulos que controlaban, sabiendo que en aquellos locales la información es poder. Siempre caía algún modélico padre de familia de Berlín o de Hamburgo, cuyas fotografías femeninamente acompañado se adjuntaban a su informe: "O pagas o tu familia sabrá lo que haces aquí de vacaciones". Escueto y claro. Un mensaje diáfano.
Luego llegaron las palizas. tan frecuentes como un entreno en el gimnasio. Y los sobornos a algunos policías, que en todas partes cuecen habas. Cuentan que solo eran educados cuando llegaban a la sucursal bancaria a ingresar sus ahorrillos. Con los bancos no querían problemas y las entidades con ellos tampoco, así que todos contentos.
Pero los moteros se pasaron de frenada. Una cosa es controlar algunos clubs de alterne y otra colonizar la Platja de Palma con gigantescos tipos con cara de pocos amigos y chalecos de cuero hasta en verano, que no es lo mejor para transpirar. Los forzudos a dos ruedas acabaron cayendo uno a uno, como las fichas de un dominó. Ahora, once años después, han vuelto con ganas de revancha. Que Dios nos pille confesados.
25 comentarios
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Carlos IglesiasCuanta más delincuencia, más turismo, como en Barcelona, el mundo al revés.
¿Por qué se pixela la cara de los delicuentes? Si acaso, la de los agentes para protegerles!
Tampoco son malas personas. Conozco a varios de ellos y no todos son alemanes!!!!! ni franceses ni suecos ni ingleses ni bulgaros ni polacos ni.... los hay mallorquines igual que los hay de todas las nacionalidades. Los vikingos ya hace mucho pasaron por mallorca por mar y tierra y no eran todos rubios grandes y de ojos claros.
Dios, por supuesto. Pero mejor que sean los jueces los que "confiesen".
Entre los paga pensiones que vienen a trabajar en lo suyo y estos...van a acabar con el turismo. Esa fuente de ingresos que tanto critican algunos con el estómago lleno.
Bueno la conclusión de la noticia es "que Dios nos pille confesados" pues si tal cual porque si esperan otra cosa olvídense , esto se ha convertido en eso un paraíso para delincuentes si o si , o mejor dicho lo han convertido quienes nos gobiernan que una mayoría son lo mismo delincuentes con corbata o si ella y sin ir mas lejos hace unos 45 minutos en la zona de la Intermondal justo detrás llegan dos magrebies se acercan a una bibicleta atada a un árbol y delante de como poco 80 personas petan el candado y uno se la lleva a la carrera al gritarle se gira me hace una peineta y se marca un sprint hacia el interior del parque , y desaparece y esto lo hemos visto pues lo dicho mucha gente ,eso si poli ninguno en todo el centro de Palma en una zona mas que conflictiva y con manadas de estos delincuentes de importación tomando el sol en el césped como lagartos al acecho de cualquier posible victima , por esto y por mucho mas como esta el patio si vas vale que Dios nos pille confesados ya que si encima en defensa propia dañas a una de estas alimañas te buscas la ruina o que te roben no hay mas alternativas .......
"De Alemania tuvieron que huir porque la Polizei no se andaba con chiquitas...".La diferencia es que en Alemania los jueces apoyan las actuaciones que hacía la policia contra ellos y que aquí hay políticos,jueces y policias que les deben proteger...
Cualquier delincuente es feliz en España...por algo sera
Vuelven porque nuestra justicia buenista se lo permite y fomenta. Se fueron de Alemania porque las leyes eran más duras, y ¿A donde han venido?, pues aquí, paraíso del delincuente, con leyes que dan risa comparadas con otros países. Y así nos va, mientras el pagano de siempre, a seguir saqueado a impuestos y a callar, con gran alegría del ministro de justicia y del presidente mentiroso.
Tenemos los policías que tenemos, los fiscales que tenemos, los jueces que tenemos. ¿Qué puede salir mal?