El pacto entre las partes ha sido alcanzado este lunes al inicio del juicio celebrado en la Sección Primera de la Audiencia Provincial. También estaba acusado el padre y fundador de la empresa, aunque falleció durante el procedimiento.
Los cuatro hermanos, tres hombres y una mujer, han aceptado cada uno una pena de un año de prisión por un delito contra la salud pública, mientras que para dos de ellos, además, se ha dictado pena de 12 meses de prisión por los delitos de falsedad en documento mercantil, falsedad y contra los derechos de los trabajadores, a razón de cuatro meses por cada delito.
Según han reconocido los acusados, entre 2015 y 2018, incurrieron en numerosas irregularidades sanitarias en relación a los productos cárnicos que ofrecían en el establecimiento.
Entre otras prácticas, no contaban con datos sobre su trazabilidad, manipulaban el etiquetado para cambiar la fecha de caducidad, ofrecían comidas preparadas sin autorización y despiezaban carne también sin estar habilitados para ello.
Además, imponían a los trabajadores jornadas maratonianas de trabajo sin respeto a los descansos y sin pagar las horas extraordinarias que realizaban.
La fiscal solicitaba penas que ascendían a 25 años de cárcel y se ha apreciado ahora el atenuante de dilaciones indebidas. La empresa tendrá que abonar una multa que supera los 10.000 euros y se ha decretado el cierre del comercio ubicado en Santa Ponça, aunque la actividad en las naves de las que dispone la sociedad permanece activa.
15 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
En este pais hagas lo que hagas no entras.
Carne caducada venden en todas partes, yo hace años que me ando con ojo, nada de comprar cosas que te las cortan al momento, demasiadas veces lo he tenido que tirar.
Cuatro españolistos menos. El problema es que son como un cáncer y este país esta llenos de ellos
El que no entienda cuál es el mensaje de los jueces al respecto, será un pringado toda su vida
Se tiene que publicar que empresa es y no comprarles nada jamás....
Otros que se van de rositas. ¡Viva y vivan estos jueces y fiscales! La justicia está bien; el problema es que no la hacen cumplir los jueces y fiscales que tenemos.
Tres años vendiendo carne caducada,y por tanto peligrosa para la salud y explotando a los trabajadores, les sale por 10000.euros. Es muy buen negocio, les compensa.
AgermanatNo será en nombre de Sánchez?
Sus empleados les quemaron, pusieron toda la sal sobre la herida, lo tenian claro para cobrar el paro !!!!!!!!!!!!
Que suerte que no soy juez.