Dos forenses aseguran que la víctima del crimen de la autopista de Llucmajor estaba tumbada cuando fue atropellado

La forense que acudió al levantamiento del cadáver del turista alemán que falleció atropellado tras ser arrojado desde una furgoneta en marcha en la autopista de Llucmajor ha declarado este martes en el juicio con jurado en la Audiencia de Palma. «Tim Vogt se encontraba boca abajo cubierto por una manta térmica», ha recordado la médica. El joven, de 20 años, llevaba una camiseta naranja, bermudas negras y un Apple Watch sin esfera la noche de 8 de octubre de 2022. «Estaba tumbado cuando sufrió el atropello, tenía lesiones en la cabeza y en el tórax».

La médica forense que realizó la autopsia del cuerpo ha manifestado que las heridas estaban, "básicamente", en el tronco superior, "a nivel del hígado y de los pulmones". El joven, además, tenía una fractura abierta en el cráneo. "Las lesiones son compatibles con un aplastamiento y arrastramiento". Tim Vogt, según la facultativa, presentaba tres lesiones graves que le podrían haber ocasionado la muerte al ser arrollado. "En el cráneo tenía una fractura, un traumatismo en el tórax y una ruptura del hígado. Eran heridas compatibles con un atropello en posición de decúbito".

Los responsables del informe de química y drogas que realizaron el análisis de sangre y orina no detectaron ninguna sustancia estupefaciente en el cuerpo del turista alemán. Sin embargo, arrojó un resultado positivo de 2,41 gramos por litro de alcohol en sangre.

La Fiscalía reclama una condena de 25 años de cárcel por asesinato para cada uno de los dos acusados de arrojar al joven a la autopista desde una furgoneta Citroën Berlingo. Está previsto que los dos hombres declaren este miércoles por el supuesto crimen de Tim Vogt. Las defensas alegaron el primer día de juicio con jurado que el turista alemán se tiró del vehículo en marcha.