Juicio en Palma a un joven por estafar a una mujer de Alemania tras hacerse pasar por soldado en Afganistán

El supuesto soldado americano Robert Bills, en realidad, era un joven nigeriano que desde Palma estafó a una mujer que vive en Alemania. La Fiscalía reclama una condena de dos años y medio de cárcel para el hombre y que devuelva a la víctima la cantidad que se apropió. El juicio se celebrará próximamente en un juzgado de lo Penal de Vía Alemania.

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Los hechos tuvieron lugar a finales de agosto del año 2020, según recoge la Fiscalía en su escrito. El acusado, de 30 años, se puso en contacto a través de Instagram con una mujer que reside en Alemania. Las conversaciones continuaron por WhatsApp y por Google Hangouts. El joven se hacía pasar por soldado estadounidense destinado en Afganistán e hizo creer a la perjudicada que le enviaría efectos personales de alto valor.

La mujer, para recibirlos, tendría que abonar una serie de cantidades de dinero y el 10 de agosto realizó una transferencia de 3.800 euros a una cuenta bancaria española. Días después el joven la convenció para que le transfiriera 8.000 euros más y así podría recibir los efectos que le había enviado. De lo contrario, el supuesto soldado estadounidense le dijo que se suicidaría.

La víctima llevó a cabo dos transferencias más con la cantidad que le pidió el procesado, pero finalmente pudo anularlas al percatarse de que se trataba de una estafa. La mujer interpuso una denuncia por estos hechos ante la fiscalía de Bayreuth, en Baviera, y aportó uno de los emails de la supuesta empresa de paquetería con los datos de la cuenta a la que había transferido el dinero.

El Ministerio Público, además de la pena de dos años y medio de prisión para el acusado por un presunto delito de estafa, también solicita la expulsión de España durante un tiempo de 10 años.

La mujer se enamoró y estaba dispuesta a enviarle todos sus ahorros

La víctima de la estafa se enamoró del supuesto soldado estadounidense y estaba dispuesta a enviarle todo el dinero que tenía en sus cuentas. El banco de la mujer le alertó de que la cuenta de España a la que realizó las dos transferencias de 8.000 euros se encontraba en una lista negra y anuló las operaciones.