Carlota Casiraghi. | Efe

TW
4

A sus 25 años, la hija de Carolina de Mónaco tiene que lidiar a diario con fotógrafos que no paran de perseguirla para conseguir la ansiada instantánea que evidencie que la joven tiene una relación con el actor Gad Elmaleh. Pero las persecuciones han llegado a un punto insoportable para la joven que ha empezado a tomar acciones legales por «violencia moral» y «montajes».

Carlota está harta de ser el objetivo número uno de la prensa desde que comenzaron los rumores sobre su situación sentimental. Cansada de esta situación, ha optado por dejar el asunto en manos del abogado Alain Touca, el mismo que llevó el caso de Diana de Gales.

El letrado ha iniciado una serie de litigios contra algunos medios ya que según denuncia, «mi clienta ha sido perseguida sin descanso, día y noche, por una docena de individuos y/o fotógrafos». Tal y como ha dejado claro la joven, siente que está siendo víctima de un «acoso mediático y físico».

«UN INFIERNO DIARIO»

Toucas advierte que la situación que está viviendo Carlota supone sin lugar a dudas «un peligro» y añade: «La princesa vive un infierno diario. Estas persecuciones de coches de motos y coches representan un riesgo muy grave de violencia física. También ponen en riesgo a otros. Yo lo viví con la princesa de Gales a quien tuve el honor de representar y no tengo ningún deseo de repetir».

La situación para Carlota se complicó desde que saliese a la luz su presunto idilio con el actor Gad Elmaleh, de 40 años, relación que destapó la revista Paris Match.