Los hombres son cada vez más presumidos y muchos de ellos sueñan, como nosotras, con tener un buen vestidor donde ordenar adecuadamente sus prendas, complementos y accesorios. Cuando uno vive en pareja debe compartir espacios, pero cuando la pareja está formada por dos varones o cuando uno vive solo, se puede permitir el lujo de construir un práctico vestidor de aspecto masculino.
Cuando podemos aprovechar una habitación que no usamos para convertirla en vestidor, tendremos espacio suficiente, aunque a veces es un pequeño trastero que ni siquiera recibe luz del exterior. En estos casos es necesario planificar bien la correcta iluminación del vestidor, pues nada hay más molesto que intentar encontrar la prenda adecuada sin contar con suficiente luz.
Por eso es recomendable también que tanto los muebles, como las paredes y el techo de esta estancia se decore en colores claros que favorecen la luminosidad, aunque podemos reservar las maderas oscuras para el suelo o para los vestidores generosos en metros y en luz natural. Si el presupuesto lo permite lo ideal es hacer el vestidor a medida. Si no, aprovecharemos el espacio con estantes y barras, además de una cajonera para los objetos más pequeños.
Aspecto clásico con estos muebles a medida en gris, con molduras.
Cuando no hay ventana en el vestidor es preferible elegir tonos claros.
Los hombres tienen muchas camisas: hay que poner barras bajas.
Sencillas estanterías con barra baja permiten almacenar muchas cosas.
Algunas prendas pueden dejarse a la vista, mientras otras pueden mantenerse bien ordenadas detrás de unas puertas.
Los cajones con distintos apartados nos sirven para conservar en orden los pequeños accesorios, como gafas de sol y relojes.
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