Estas jornadas calurosas pueden mantenernos en vilo toda la noche | Denis Mamin

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Con el incremento de las temperaturas debido al cambio climático, las noches tropicales, aquellas en las que la temperatura no baja de los 20 grados Celsius, se han vuelto cada vez más comunes. Dormir bien en estas condiciones puede ser un desafío, pero con algunos trucos sencillos, es posible mejorar la calidad del sueño y enfrentar mejor el calor nocturno.

1. Mantén tu habitación fresca

Cierra las cortinas y persianas durante el día para evitar que el calor se acumule en tu habitación. Ventila la casa solo durante las horas más frescas, generalmente temprano en la mañana o tarde en la noche. Si es posible, utiliza un ventilador o aire acondicionado para mantener la temperatura baja.

2. Opta por ropa de cama adecuada

Utiliza sábanas de algodón o lino, ya que estos materiales son transpirables y ayudan a regular la temperatura corporal. Evita las telas sintéticas que tienden a retener el calor y pueden hacer que te sientas más incómodo durante la noche.

3. Mantén una rutina de enfriamiento

Tomar una ducha tibia antes de acostarte puede parecer contradictorio, pero ayuda a reducir la temperatura corporal. Al salir de la ducha, tu cuerpo comenzará a enfriarse, lo que te ayudará a sentirte más fresco cuando te metas en la cama. También puedes probar el «método egipcio»: humedece una sábana o una toalla y colócala sobre ti mientras duermes.

4. Hidrátate adecuadamente

Mantén un vaso de agua fría cerca de tu cama para poder hidratarte si te despiertas durante la noche. Evita bebidas con cafeína o alcohol antes de acostarte, ya que pueden deshidratarte y dificultar el sueño.

5. Usa dispositivos de enfriamiento

Coloca bolsas de hielo o compresas frías en puntos estratégicos como la nuca, las muñecas o los tobillos. Esto puede ayudar a bajar la temperatura de tu cuerpo rápidamente y hacer que te sientas más cómodo. Además, considera congelar las fundas de las almohadas antes de acostarte para disfrutar de un frescor adicional.

6. Adapta tu posición para dormir

Dormir en una posición que permita una mejor circulación del aire a tu alrededor puede hacer una gran diferencia. Intenta dormir en una posición extendida y evita el contacto directo con otras personas o mascotas, ya que el calor corporal adicional puede aumentar la incomodidad.