Este dulce es el preferido de muchos ya que pone fin a las fiestas navideñas y, además, con esta tradición se esconde un juego. | Irene Arango

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El roscón de Reyes es el protagonista gastronómico indiscutible de del seis de enero. Año tras año, son muchas las panaderías y pastelerías de Mallorca que trabajan en su elaboración durante los días previos a la llegada de Sus Majestades de Oriente. Con frutas escarchadas, azúcar, cobertura de chocolate, frutos secos y con o sin relleno. Hoy en día, las posibilidades son infinitas, así como también lo son los gustos de cada uno.

Este dulce es el preferido de muchos ya que pone fin a las fiestas navideñas y, además, con esta tradición se esconde un juego. En el centro del roscón está la corona y escondido dentro del pastel un rey y un haba, aquel que encuentre el rey podrá coronarse, mientras que el que encuentre el haba deberá pagarlo. Sin duda, más allá de degustar el dulce típico son muchas las familias que se divierten siguiendo la tradición.

Las pastelerías más destacadas de Mallorca

Forn de Ca na Teresa

En Palma en las calles Colom, 16; Avinguda del Cid, 30; Carrer de Llucmajor, 100; Av. Tomàs de Villanueva Cortés, 13; y Mercat de l'Olivar; en Marratxí en la calle Gabriel Maura, local 3; en Palmanyola en la Avinguda de les Dàlies, 45. Este horno, que surgió en el año 1966 de la mano de Juan Rodríguez y María Teresa Mesquida, trabaja los días previos a la festividad para atender la gran demanda. Allí los elaboran de nata, trufa, crema y cabello de ángel. Y por encargo también hacen algunos muy especiales; por ejemplo, cubierto de chocolate, o bombón, y de turrón. El secreto está en el trabajo artesanal que se realiza por la noche, que tiene como resultado un producto de excelente calidad. Entre las más novedosas está la opción tricolor (trufa, nata y crema), con hojaldre de nata, de crema y también merengue y el rosco del Cardenal, elaborado con merengue, una capa de bizcocho muy fina y una capa de crema de Kinder.

Lluis Pérez Pastisser

Carrer Bonaire, 14, Palma. Según TripAdvisor es uno de los mejores hornos en los que comprar un roscón de Reyes. Esta panadería destaca por la utilización de productos locales en sus elaboraciones y por trabajar la masa para darle un equilibrio y una textura sin igual, huyendo de artificios para conseguir un resultado tradicional.

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Pastelería Reina Maria Cristina

Carrer de la Reina Maria Cristina, 69, Palma. Este horno de Palma, situado cerca de la Plaza de Toros, está especializado en la elaboración de ensaimadas, pero durante las fiesta también preparan unos ricos roscones de Reyes.

Fornet de la Soca

Plaça de Weyler, 9, Palma. Este horno artesanal está especializado en repostería tradicional con una tarea de recuperación de recetas elaboradas de forma natural. Tomeu Arbona recuperó hace unos años la tradición de el Tortell dels Reis, con espectacular resultado de sabor, forma y presentación. Este tortell se elaboraba antiguamente en los obradores de las desaparecidas confiterías finas de Palma, en Cas Net y Can Frasquet. Se trata de dos especialidades más refinadas, con los ingredientes todos ellos naturales, del cuarto embetumat o la tortada reial. Los primeros van rellenos de yema, con sus correspondientes sorpresas, y unos con merengue solo y otros de chocolate y merengue. Luego está el mismo sistema, pero con un tortell de gató.

Forn de Sant Francesc

Carrer de Sant Francesc, 126, Inca. Ferrero, kinder, nata, chocolate y crema son algunos de los rellenos que podrán encontrar en esta panadería de Inca.

Forn de Can Segura

Plaça Abeuradors, 6, Muro. Esta panadería artesanal de Muro ofrece roscones de Reyes tradicionales. Con o sin relleno, pero todos con una elaboración lenta y cuidada.

En cuanto a los roscones que se pueden encontrar en supermercados, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) apunta a que los rellenos de nata de Eroski, Ahorramás, El Corte Inglés y Dia se sitúan como los mejores que se pueden adquirir en las grandes cadenas comerciales. La última opción, es sin duda la más artesanal, los más atrevidos y 'cocinitas' pueden hacerse con una de las recetas de Internet y lanzarse a la repostería. Además de una tarde divertida entre fogones, de bien seguro que el resultado será exquisito.