«La preparación ha sido muy buena, y tengo la sensación de trabajar con mayor facilidad, después de cuatro años con el grupo. Gracias a esto hemos recuperado conceptos con una gran rapidez y hemos podido pasar a hacer pequeños ajustes y algunas novedades», dijo Scariolo.
«Los jugadores me han impresionado en este sentido. En cuanto a los problemas físicos, Rudy se entrena casi con total normalidad. Ibaka ha vuelto de sus minivacaciones muy bien y tiene un año más de experiencia, y Juan Carlos Navarro realiza pequeños tramos de entrenamiento aunque sin contacto», añadió el seleccionador.
El estado del capitán, de Navarro, sigue siendo la principal preocupación de todos.
«Hay un poco más de optimismo, aunque seguimos en vilo porque su presencia en los Juegos sigue sin respuesta. Va mejorando y el jugador utiliza casi todo su tiempo libre en estar. Ahora queda la dolencia en la espalda como consecuencia de los malos apoyos de estas últimas semanas», explicó.
El buen ambiente de la selección volvió a salir como clave de los éxitos, igual que ocurre en la de fútbol.
«Las comparaciones entre fútbol y baloncesto son difíciles, pero nos enorgulleció cuando hace algunos años, los de fútbol comentaron que el ambiente de la selección de basket era un espejo en el que mirarse. Esto es lo que hace que cada año los jugadores quieran venir al equipo, pese a las lesiones, quitando tiempo a sus vacaciones», indicó Scariolo.
El entrenador intentó desviar el foco de la selección de Estados Unidos y de un posible partido contra ellos en una hipotética final.
«No tiene ningún sentido fijarnos ya en Estados Unidos cuando queda tanto por hacer y conseguir hasta llegar a eso. Tienen un talento impresionante. Quizás en el perímetro, ampliable hasta la posición de '4', tienen el talento más grande que cualquier otra selección. Reconocemos que son el equipo a batir», aseguró.
Gran Bretaña, Francia, Australia. La preparación es contra equipos directos en los Juegos, o que pueden serlo en los cruces.
«Para hacer una buena preparación tenemos que jugar contra equipos en disposición y esos son los que están preparando los Juegos como nosotros. No hay otra posibilidad. Además nuestros rivales llevan más tiempo de rodaje que nosotros y nos pondrán el listón muy alto», informó el seleccionador.
Los cruces en los Juegos serán, como casi siempre, el momento de la verdad.
«Cualquiera que salga del otro grupo será un aspirante a medalla. Seguramente será un momento de competición muy complicado», informó.
El seleccionador también habló del grado de importancia de Serge Ibaka en el equipo.
«Todos conocemos los roles de todos, pero los partidos pueden ir modificando algunas cosas. En el caso de Serge ya fue muy importante el año pasado en el Europeo de Lituania, pero este año ha mejorado mucho, porque tiene un año más de experiencia», resaltó.
«La evolución de Ibaka es en una dirección, la utilización de sus excelente recursos físicos. Cada vez conoce mejor el juego, cada vez toma mejores decisiones y cada vez sabe rentabilizar mejor su tremenda energía», finalizó Sergio Scariolo.
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Pues visto lo visto, se le necesita como el pan.