Desde el entorno más próximo del jugador se mantiene silencio y una actitud prudente, aunque fuentes próximas han descartado que sufra un problema de salud grave, como algunas informaciones apuntan. Otras, refieren problemas de tipo personal o familiar (enfermedad, depresión...), pero ni Álex Abrines si sus más allegados confirman o desmienten ninguna de estas posibilidades.
Lo que sí parece claro es que el jugador, que estará apartado de las pistas hasta solventar esos problemas, seguirá un tiempo en Estados Unidos con ese fin. Incluso tiene la opción, hasta la madrugada del martes, de firmar por otro equipo de la NBA. En caso contrario, las puertas de Europa se le podrían abrir y, allí, el Fútbol Club Barcelona jugaría con ventaja sobre el resto de candidatos.
Abrines, de 25 años, apenas ha aparecido en dos partidos desde el pasado 23 de diciembre, sin participar por razones personales, aunque en un principio se justificó su ausencia por un problema en el estómago. El jugador habría perdido mucho peso tras sufrir un virus y su recuperación habría sido más lenta de lo esperado en un momento clave, toda vez que el isleño acababa contrato con los Thunder de Oklahoma al final de la presente campaña y empezaba a trabajarse en eu futuro.
El jugador mallorquín disputó seis minutos contra los Magic de Orlando el 29 de enero y nueve minutos contra los Heat de Miami el 1 de febrero, siendo éstas sus últimas apariciones, por ahora, en la NBA. En los 31 partidos que disputó esta temporada, Álex Abrines promedió 5,3 puntos y 1,5 rebotes. Con Oklahoma ha disputado en dos temporadas y media 174 partidos, con promedios de 5,3 puntos y un 36,8 por ciento de acierto en los triples.
Desde los Thunder de Oklahoma, tanto su entrenador, Billy Donovan, como los principales responsables de la franquicia han expresado su total apoyo a Álex Abrines en estos momentos tan delicados, además de agradecer su «transparencia y honestidad» en todo momento. «Aunque no vaya a ser parte del equipo, estamos aquí, él es parte de la familia y vamos a ayudarle a seguir adelante», declaraba el técnico de los Thunder, quien reclamó ante estas circunstancias «respeto» para Abrines, que al acordar su salida de Oklahoma habría renunciado a casi la totalidad de los 1,8 millones de dólares pendientes de su ficha.
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Es menester respetar la intimidad de las personas y los problemas personales de este chico no nos importan. Lo que importa es que lo antes posible los resuelva y vuelva a ser feliz con su vida y sus evoluciones en el baloncesto. No todo el mundo se puede adaptar a unas costumbres tan diferentes de las nuestras.