Espoleado por su épica remontada en el derbi ante el Palmer Basket Mallorca, los hombres de Ricardo Uriz entraron en el partido dispuestos a plasmar su progresión y enlazar su segunda victoria consecutiva para empezar a mirar hacia arriba en la tabla. Los mallorquines, sin Balfourier ni Marc García, firmaron un gran arranque de encuentro para abrochar el primer cuarto con solvencia y una ventaja de siete puntos (21-14).
El Fibwi Palma mantuvo su velocidad de crucero para llegar a manejar ventajas de diez puntos, pero la reacción del Mataró apretó el marcador al descanso (39-36).
El paso por los vestuarios le sentó mejor al Mataró, que comenzó a carburar en ataque. Los mejores minutos ofensivos de los visitantes coincidieron con el atasco en ataque de los mallorquines, que salieron mal parados del intercambio de golpes y cedieron la iniciativa en el electrónico y en el juego. Y es que el encuentro comenzó a desarrollarse en mayor medida con las pautas que le interesaban a los de Mataró, que tuvieron en Juanola a su máximo anotador con 20 tantos.
El Mataró se sintió cómodo con el guion en el que se desarrollaba el encuentro y acertó a mantenerse por delante en un cuarto en el que los dos equipos priorizaron el ataque sobre la defensa. Con ambos contendientes enzarzados en un combate por ver quién se mantenía de pie entre tantos golpes, todo se iba a resolver en un último minuto en el que sobrevolaba el recuerdo de la pasada jornada. Esta vez salió cruz para el Fibwi. Dos triples consecutivos de Javier García acercaron a los locales hasta la oportunidad de voltear el marcador, pero el último intento desde más allá de los 6,75 metros de Pablo G. Longarela por revertir la situación no alcanzó para discutir la victoria final del Mataró.
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