El filial consigue la primera victoria en Son Bibiloni

Gramanet 1

Mallorca B: Tomeu Nadal (1*), Jaime (2), Polaco (1), Ximo (1), Ramón (1), Alberto (1), Aridai (1), Herve (1), Sergi (1), Tejera (2), Didac (1).
Cambios Abdón (2) por Herve y Aleix (2) por Aridai.

Gramanet: Barragán (1), Óscar (1), Rubén (1), Alfonso (1), Céspedes (1), Axel (1), Gimeno (1), Vila (1), Cazorla (1), Guille (1) y Balda (1).
Cambios: Pradas (1) por Balda, Guille (1) por Juste y Óscar (1) por Alfonso.

Àrbitro: Mariano Medina (2). Amonestó con tarjeta amarilla a los locales Jaime, Ximo, Aberto, Herve, Dídac y al técnico Jaume Bauzà; y a los visitantes Barragán, Rubén, Alfonso, Gimeno y Óscar.

Goles: 1-0, minuto 49, Sergio Tejera. 2-0, minuto 82, Sergi.2-1, minuto 87, Vila.

El Mallorca B se reencontró con la victoria ayer en Son Bibiloni y consiguió tres puntos importantísimos ante la Gramanet.
La primera mitad fue súmamente aburrida y desesperante para los aficionados que se dieron cita en la Ciudad Deportiva rojilla. Después de tres jornadas consecutivas sin conseguir ni un sólo punto, esos primeros cuarenta y cinco minutos sembraron el temor de un posible resultado adverso. Ni con la entrada en el equipo de Sergi Enrich y Sergio Tejera, el Mallorca fue capaz de rematar a puerta.

A la vuelta de vestuarios, Jaume Bauzà dio entrada a Aleix y Abdón, dos cambios que revolucionaron el juego de su equipo y que decantaron el dominio del juego y de la posesión hacia la escuadra rojilla.

De las botas de Aleix nació el primer gol al pasarle desde la banda derecha el esférico a Tejera que se encontraba en la media luna del área y que, de fuerte disparo, marcó un gran tanto por la escuadra izquierda de Barragán. Era la primera ocasión y el primer disparo a puerta local.

El gol dio confianza al filial, que cambió de actitud y se volcó en atacar y conseguir el tanto de la tranquilidad.
Fue Sergi Enrich en el minuto 82 y después de dos claras ocasiones de Aleix y Abdón, el que consiguió el tanto de la tranquilidad al tocar sobre la línea de gol un centrochut de Aleix.

Con el partido decidido, la Gramanet recortó distancias gracias a un contragolpe que resolvió muy bien Vila superando con facilidad al guardameta Nadal.