El escolta de la selección española de baloncesto Rudy Fernández atiende a los medios durante un entrenamiento en el Triángulo de Oro, en Madrid. | Efe

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El internacional mallorquín Rudy Fernández avisa del alto nivel de baloncesto que se verá el próximo mes de agosto en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, donde España buscará un tercer metal consecutivo que sería «algo histórico» y «un sueño» en lo personal.

«Hemos conseguido medallas muy importantes como la del Mundial y los dos últimos Juegos, poder conseguir una medalla este año sería algo histórico para el baloncesto español y un sueño para mí», destaca el alero del Real Madrid ante los medios en la concentración española en la capital.

El balear ensalza así el nivel de España aunque reconoce la exigencia que plantea la cita en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. «Sabemos que hay otras selecciones con un gran cartel, grandes selecciones y no sólo Estados Unidos. No olvidemos que en el grupo tenemos a Argentina y Brasil. Hay equipos que están en repesca como Italia, Francia, Canadá, que son equipazos», repasa.

«Estados Unidos sigue teniendo un gran equipo pese a las bajas. Será un rival muy duro. Nuestro grupo además es muy difícil. Brasil es la anfitriona y ya nos ganó hace cuatro años en Londres. Argentina es veterana pero parece que no pasan los años por ellos. Van a ser unos bonitos Juegos a nivel de baloncesto», añade.

«Hay un etcétera de muchos equipos, este año en Río se va a ver mucho baloncesto y del bueno», sentencia un Rudy Fernández que disfruta de un gran momento de forma después de una temporada complicada por las lesiones de espalda. Mejor tarde que nunca, el jugador del Madrid celebra su recuperación.

«Es cierto que he llegado en mi mejor momento al final de temporada, pero con eso ayudé al equipo a ser campeón de liga. Nos quejamos del calendario y físicamente lo notamos. Llevo 13 años en la selección española y al no tener vacaciones físicamente lo notas», explica.

En cuanto a lo apretado del calendario, Rudy se identifica como uno de los más críticos. «Esperemos seguir así muchos años pero si sigue así el calendario más de uno tendrá que decidir tomarse algún verano de descanso. Lo podemos decir por activa o por pasiva, no damos para jugar tantas competiciones», analiza.