Vinicius Junior celebra el tanto. | Javier Etxezarreta

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El Real Madrid dio un golpe sobre la mesa en el Reale Arena al tumbar con solvencia a uno de sus perseguidores como la Real Sociedad y afianzar su liderato. Los goles de Vinicius y Jovic en el arranque del segundo tiempo marcaron las diferencias en un partido en el que la peor noticia para los de Ancelotti fue la lesión de Benzema. Los blancos dominaron buena parte la primera mitad, aunque le faltó peligro en los metros finales, lastrado por la temprana lesión del francés, que fue sustituido por Jovic al cuarto de hora. Los locales también enseñaron sus virtudes en ataque poniendo a prueba a Courtois en algunos acercamientos que obligaron a la zaga merengue a trabajar con eficacia.

Vinicius, que había amagado en la primera mitad, golpeó en los primeros compases de la segunda. Aprovechó una gran dejada de Jovic en el interior del área para abrir el marcador en un arranque que hizo dudar a la Real. Y es que mientras los donostiarras digerían el revés, recibieron otro zarpazo, esta vez del delantero serbio, que pasó de asistente a goleador al rematar en el segundo palo la prolongación de Casemiro en el primero tras un saque de esquina.

El Madrid demostró jerarquía para administrar su ventaja y sus esfuerzos, ya que Ancelotti optó por dar descanso a hombres importantes y la Real no encontró la manera de poner en aprietos a un líder reforzado.