Dragisa Gudelj sigue «estable» después de su desvanecimiento

El partido del pasado fin de semana entre el Córdoba y el Racing de Ferrol, de la Primera RFEF, fue detenido a los diez minutos de juego y posteriormente suspendido debido al desvanecimiento sobre el terreno de juego de un futbolista del equipo local, el central serbio Dragisa Gudelj, que fue atendido por los servicios médicos sobre el césped de estadio El Arcángel y posteriormente trasladado en ambulancia, ya consciente, a un hospital. | Salas

EfeCórdoba27/03/23 16:19
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El central serbio del Córdoba Dragisa Gudelj sigue «estable» después del desvanecimiento sufrido el sábado durante el partido de su equipo ante el Racing de Ferrol, de la Primera División RFEF, y está previsto que «a lo largo de la tarde» de este lunes pase a planta desde la UCI del hospital cordobés al que fue trasladado.

El club cordobés informó en un parte médico de que su futbolista, de 25 años y hermano del sevillista Nemanja Gudelj, sigue mostrando mejoría y «se encuentra bien», aunque aún pendiente de distintas pruebas complementarias a las que ya se le han hecho. «Ya se le han realizado varias pruebas en el Hospital Universitario Reina Sofía y este martes se le realizarán más. A lo largo de la tarde se le subirá a planta», precisó el Córdoba.

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Dragisa Gudelj fue evacuado el pasado sábado en ambulancia a dicho centro hospitalario desde el estadio El Arcángel después de que se desvaneciera sobre el césped en el minuto 10 del encuentro entre su equipo y el Racing de Ferrol. En ese instante, el árbitro detuvo el partido y los servicios médicos atendieron y reanimaron al futbolista serbio, quien fue trasladado posteriormente en ambulancia, ya consciente, al hospital.

El central cordobesista se encontró indispuesto y se desplomó sobre el terreno de juego, con lo que entraron las asistencias para realizarle un masaje cardíaco. Tras cerca de diez minutos de tensión, la ambulancia se llevó al jugador consciente en dirección al Hospital Reina Sofía y después se decidió la suspensión del partido, que registraba un empate a uno en el marcador, tras las consultas entre técnicos, futbolistas, equipo arbitral y dirigentes. Esta decisión fue anunciada por la megafonía del estadio cordobés a los más de 10.000 espectadores que asistían al encuentro.