En la actualidad, dos de ellos se encuentran en las posiciones de descenso y las posibilidades de que finalmente mantengan su plaza disminuyen jornada tras jornada. El Mallorca B ocupa la penúltima posición en Segunda RFEF con 25 puntos. Se encuentra a ocho puntos del Alzira, que en estos momentos disputaría una eliminatoria de permanencia –siempre que sea de los cuatro peores que ocupen la 13ª posición– y a nueve de la salvación cuando apenas quedan apenas cinco jornadas para que finalice el campeonato. En idéntica situación, con los mismos puntos y una plaza por encima, se encuentra el CD Ibiza.
En el caso de que ambos pierdan la categoría, la cifra de equipos que perderían la categoría sería de cinco en lugar de tres. El efecto arrastre sería catastrófico para el fútbol balear. Si se mantiene uno de ellos, en cambio, descenderían cuatro. Mirando la clasificación de Tercera, más de la mitad de la categoría, que recordemos es de solo 16 equipos, afronta las dos últimas jornadas con la amenaza del descenso sobrevolando. Desde el noveno clasificado, que actualmente en el Mercadal con 37 puntos, hasta el Inter Manacor, que suma 29, están implicados en la lucha por quedar del undécimo puesto hacia arriba para evitar problemas.
La incertidumbre se mantendrá hasta el 14 de mayo, cuando finalice la temporada en Segunda RFEF, si bien antes ya se podría conocer el destino tanto del Mallorca B como del CD Ibiza. Y se alargará dependiendo del futuro del equipo que represente al fútbol balear en la eliminatoria de ascenso. Es el galimatías de la Tercera balear...
El apunte
Media categoría implicada
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
L'organització del futbol, en aquest cas, la divisió en categories, me recorda molt la de l'educació. Cada vegada que hi ha un canvi del plà d'estudis (aquí de categoríes) és per empitjorar. Des de fa més de 50 anys al manco. Li fan un bé al 10% de clubs i un mal al 90% restant.