El Real Madrid tira a la lona al Girona

Con su entrenador Míchel Sánchez en un palco, debido a una polémica sanción, el Girona acusó un mal inicio de partido y Vinícius cobró peaje muy pronto. Situado en el pico izquierdo del área rival, el '7' merengue recibió un pase de Fede Valverde y se perfiló para tirar a pie cambiado. Vinícius, raudo, ejecutó desde la frontal un derechazo que fue cogiendo vuelo y que entró en la portería de Paulo Gazzaniga, junto al palo y cerca de la escuadra. Para colmo, Yan Couto defendía al goleador y se hizo daño poco después de ese 1-0; aunque el lateral brasileño se recuperó, vivió luego una pesadilla por culpa de sus compatriotas.

Con el marcador favorable, los pupilos de Carlo Ancelotti gozaron al son de Toni Kroos en la medular. También Eduardo Camavinga era un seguro de vida en esa zona del campo, ante un Girona sin ideas y con ausencias notables en su once titular, como las de Daley Blind y Yangel Herrera. Apenas hubo actividad reseñable hasta el minuto 35, cuando Vinícius brilló haciendo una asistencia, de rosca y con el exterior de su bota diestra, para la carrera de Bellingham a la espalda de Eric García. Bien desmarcado de los centrales, el inglés regateó a Gazzaniga yéndose hacia su izquierda y, apurando hasta la línea de fondo, marcó con la zurda. Aunque el equipo visitante retiró a Cristian 'Portu' en el descanso, la entrada de Pablo Torre apenas le cambió la cara. Tras espantar un par de acercamientos peligrosos en la banda de Miguel Gutiérrez, el Real Madrid continuó a su gusto y lo plasmó con el 3-0, obra de Bellingham en el 54' tras un jugadón de Vinícius por el lado izquierdo del ataque.

Habiendo vuelto loco a Couto, pisando el balón y con una semiruleta, el '7' blanco tiró raso y Gazzaniga repelió la pelota; Bellingham, pese a una leve cojera, llegó rápido para adelantarse a la zaga y empujar a placer su segundo gol. Tres minutos más tarde, el inglés se resintió de un presumible esguince de tobillo y fue sustituido por Brahim Díaz. A raíz de ese cambio, con más espacios arriba, Rodrygo Goes fraguó el 4-0 en el minuto 61. Él mismo robó el balón en el centro del campo y se puso a correr, perseguido por Couto, hasta llegar al área gerundense y culminar dicha cabalgada con un potente derechazo que entró sin remedio. Brahim tuvo la 'manita' en sus botas durante la recta final del encuentro, ya que el Girona había bajado los brazos. Un zurdazo alto de Couto, a modo de desquite, fue lo más destacado del equipo catalán en el preludio de un penalti que él mismo hizo por una falta a Arda Güler. Eso pudo significar el 5-0 en el 90', pero Joselu Mato estrelló en el poste su disparo y el árbitro no añadió tiempo. Este triunfo situó al Real Madrid con 61 puntos, amarrado al liderato del torneo, y dejó con 56 a un Girona acechado por FC Barcelona (50) y Atlético de Madrid (48).