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ALBERT ORFILA/IÑAKI OTEIZA Reynés metió el dedo en la llaga. El presidente del Real Mallorca condenó de forma enérgica el asesinato del joven Aitor Zabaleta y exigió un examen de conciencia a todo el balonpié español. «Me siento responsable y creo que todos los que en el mundo del fútbol tenemos alguna parcela de responsabilidad debemos sentirnos de esta forma. Me parece dramático e incomprensible que haya tenido que ocurrir algo así para darnos cuenta de la insensatez que representa calentar partidos, descalificar presidentes y árbitros... Un hincha ha sido apuñalado, pero la próxima vez puede ser un árbitro, un directivo o cualquier otro», significó el mandatario balear.

Reynés, visiblemente afectado al ser preguntado por incidente acaecido en los prolegómenos del partido entre Atlético Madrid y Real Sociedad, abundó en su valoración indicando que «los presidentes que con sus actuaciones fomentan violencia deberían pensarlo; los entrenadores que se dedican a calentar partidos también deberían hacerlo y los clubes que protegen y subvencionan a los grupos ultras y a toda esta deleznable afición creo que hoy deberían analizar su forma de actuar».