Los futbolistas serbios del Real Mallorca, Jovan Stankovic y Veljko
Paunovic, se encuentran ya en Palma. El primero llegó en la
madrugada de ayer miércoles y el segundo lo hizo minutos después de
las cuatro de la tarde. Los dos jugadores hablaron de sus
sentimientos y de lo que han vivido en su país, se mostraron muy
preocupados por lo que les pueda pasar a sus familias y no se
pronunciaron respecto a la propuesta de los capitanes de la
selección de Yugoslavia de boicotear las Ligas de los paises que
han intervenido militarmente en su país.
El comunicado que sirvió ayer la agencia Tanjug indicaba que la
Federación Yugoslava de Fútbol (FSJ), siguiendo la iniciativa de
tres estrellas de la selección, entre ellos el madridista Pedrag
Mijatovic, llamó ayer al boicot a los jugadores yugoslavos que
juegan en campeonatos de países miembros de la OTAN. Los otros dos
internacionales yugoslavos son Dejan Savicevic, del Estrella Roja,
y Dragan Stojkovic, que milita en las filas del Nagoya japonés,
siempre según Tanjug. El llamamiento, que se dirige también a los
entrenadores yugoslavos, apunta a los países miembros de la OTAN
que han participado en «la agresión contra Yugoslavia». De esta
manera, las medidas de presión afectarían a España, que participó
con tres aviones en el primer ataque aéreo.
Stankovic y Paunovic esperan conocer la propuesta en voz de los
capitanes antes de pronunciarse abiertamente sobre si secundarán
esta medida de protesta. El club por su parte ofreció una versión
oficial sobre esta situación. «Respetamos la propuesta pero
pensamos que la mejor manera de que los futbolistas ayuden a su
país no pasa por incumplir con sus labores. Sin embargo respetamos
lo que ellos decidan ya que dada la gravedad de la situación esto
no puede considerarse como una acción de indisciplina», informó el
club bermellón en voz de su jefe de prensa, Joan Frontera.
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