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ÀREA 11. El Sigma no ha ganado nunca ningún título nacional en sus ya ochenta años de historia, y ésta es su sexta participación en torneos europeos, siempre en la Copa de la UEFA. En la temporada 1991-1992 fue eliminado por el Real Madrid en cuartos de final como único precedente con equipos españoles, en la que fue su mejor participación europea. En esa campaña el Sigma eliminó sucesivamente al Bangor City galés, al Torpedo de Moscú ruso y al potente Hamburgo alemán antes de caer ante los blancos. La pasada temporada eliminó en primera ronda al Kilmarnock escocés por un global de dos goles a cero, para caer a continuación ante el Olympique de Marsella.

La plantilla del Sigma es muy joven, especialmente en su línea delantera. Urbanek y Vlcek son dos jóvenes promesas con talento goleador, y ya internacionales en categorías inferiores, para un equipo que se nutre principalmente de la cantera, y que cuenta con el veteranísimo defensa Oldrich Machala (36 años y casi 400 partidos con el Sigma) como principal figura. El centro del campo del Sigma Olomouc conjuga la veteranía y saber estar de hombres como Mucha y Kucera con la juventud de jugadores como Kotrys o Tomas Ujfalusi, un hábil jugador de 12 años de edad y que es otra de las joyas de la fÚrtil cantera del equipo checo.

En la portería encontramos otra clara muestra de la política de apuesta por la juventud y la cantera del equipo presidido por Jaromir Gajda. Se trata de Jindrich Skacel, un arquero de apenas 19 años que no pudo jugar el encuentro de vuelta ante el Serif Tiraspol moldavo, pero que se ha hecho con la titularidad gracias a sus excepcionales cualidades, especialmente en el juego por alto.

El Sigma Olomouc, club fundado en 1919, juega sus encuentros en el pequeño estadio de Andruv, con capacidad para 14.700 espectadores. Estos son en definitiva los poderes de un equipo con experiencia europea pero también con escasos argumentos técnicos para defender su nueva andadura en la Uefa. Sin embargo, el Sigma tendrá en esa teórica inferioridad a su mejor aliado: el Mallorca es, sobre el papel, el gran favorito para pasar a la siguiente ronda y los bermellones ya demostraron ante el Molde lo mal que les sienta la presión.