El partido adelantado de la decimoquinta fecha del torneo Apertura
del fútbol argentino entre Chacarita Juniors y Vélez Sarsfield fue
suspendido en la noche del viernes al estallar en el campo de juego
un petardo lanzado desde las graderías. El árbitro Daniel Giménez
decidió suspender el encuentro a los 21 minutos de juego, cuando
estaba igualado 1-1, con goles de Luciano Abalos, de Chacarita, a
los 12 minutos, y del portero paraguayo José Luis Chilavert, ocho
minutos más tarde, de tiro libre.
El petardo fue arrojado desde la tribuna donde estaba ubicada la
hinchada de Vélez y estalló cerca del portero de Chacarita, Jorge
Vivaldo, que sufrió mareos por la detonación. Vivaldo fue llevado
luego a una clínica, donde le hicieron estudios, pero se comprobó
que no había sufrido problemas físicos. La Asociación del Fútbol
Argentino (AFA) deberá decidir en los próximos días si aplica
sanciones o resuelve continuar el encuentro.
Ésta es la tercera vez en tres meses que la pelota debe dejar de
rodar en Argentina por esta causa, al margen de los cotidianos
hechos de violencia entre hinchas que los dirigentes del fútbol no
logran detener, a pesar de que públicamente dicen que se empeñan en
hacerlo. Hace unas semanas, un partido entre el Instituto y el
Rosario debió suspenderse a causa de una agresión con una piedra
sufrida por unos de los árbitros asistentes, que se sumó a otra que
tuvo como víctima justamente a Chilavert.
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