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El Betis rompió la racha del Real Mallorca, que llegó al Ruiz de Lopera con doce partidos sin perder (siete de liga, cuatro de competición continental y uno de Copa), en un partido que salvó del tedio la segunda mitad. La primera parte fue un suplicio para los aficionados que casi llenaron el coliseo bético, ya que ni Betis ni Mallorca mostraron ambición ni ideas en su fútbol.

El excesivo conservadurismo hizo que las ocasiones de gol fueran escasas tanto para el Betis como para el Mallorca, e incluso se las repartieron en número, dos para cada equipo. Romero (m.13) dispuso de la más clara, al que se le interpuso el meta Leo Franco, y Karhan (m.42), con balonazo cruzado, mientras que la réplica mallorquina estuvo a cargo de Nadal (m.34), tras un barullo en el área bética, y de Soler (m.37), con parada de Prats. El resto fueron imprecisiones por uno y otro bando, con un fútbol rudimentario y excesivo toque de balón, especialmente a cargo de los béticos, ante un Mallorca inoperante en la vanguardia.

En el segundo tiempo las cosas cambiaron, sobre todo tras la jugada que originó el gol del Betis, la más coordinada del encuentro, ya que los locales quisieron sentenciar y el Mallorca buscar la igualada que había mantenido durante una hora. Hasta el final emoción por la incertidumbre del marcador con dos equipos mucho más entonados aunque el triunfo se decantó para los béticos que incluso pudieron aumentar el tanteo con un remate de cabeza de Oli con balón al travesaño y que de esta manera «aparcan» sus crisis de resultados de las últimas jornadas.