Suspicacias al margen, la fortuna ha querido que el clásico balear
de Liga LEB se instale por primera vez a muchos kilómetros de su
habitual radio de acción. Bàsquet Inca y Menorca cruzarán sus
caminos en Granada, escenario de una Copa Príncipe de Asturias de
pronóstico imposible y marcada por el equilibrio de fuerzas que ha
exhibido la Liga LEB durante el primer trayecto de su fase regular.
Sólo uno de ellos avanzará en una competición que han acariciado en
varias ocasiones.
Fuenlabrada frustró las ansias de gloria del Bàsquet Inca en la
Copa que albergó Pineda de Mar "temporada 97/98", mientras que
Menorca también se quedó a medio camino durante el curso anterior
en Alicante. Melilla fue su verdugo. La historia insinúa que parece
haber llegado la hora de reivindicar un título para el baloncesto
profesional de les Illes, pero el camino está minado. Tras la
disputa de la primera jornada la representación balear quedará
reducida a un solo equipo, que deberá enfrentarse al ganador de la
eliminatoria que disputarán Granada y Orense, anfitrión y colíder
de la LEB respectivamente.
El resto del cuadro se completa con los partidos Tenerife
Canarias-Alicante y Caprabo Lleida-Melilla Caja Rural. Tercero e
imbuido de nuevo en una dinámica ganadora, Bàsquet Inca ha
consumado con buena nota su primer objetivo de la temporada. Su
presencia en la Copa Príncipe de Asturias ya es motivo de orgullo,
pero ahora Olmos quiere más. El técnico ha dejado entrever que su
equipo tiene muchas cosas que decir en esta competición. De hecho,
ha conseguido eludir al Granada en cuartos, justo lo que
quería.
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