El Real Betis llegó ayer tarde a nuestra Isla en vuelo charter procedente de Sevilla. Las principales ausencias son las de Oli, Luis Fernández, Solozábal y Juan Jesús, cuatro hombres que finalmente no han entrado en la lista de convocados.
El resto del armamento bético aterrizó en Palma con la clara intención de luchar por conseguir los tres puntos en juego.
Guus Hiddink, técnico del Betis, reconoció ayer que el encuentro frente al Mallorca es uno «de los últimos trenes» que debe tomar el conjunto verdiblanco para eludir el descenso de categoría. «Es de las últimas oportunidades, de los últimos trenes», afirmó el técnico holandés, quien precisó que su equipo debe mostrar ante el Real Mallorca el nivel de juego que desarrolló en la segunda parte del pasado partido ante el Alavés, donde creó muchas ocasiones de marcar aunque estas no se materializaran.
Hiddink explicó que en los últimos meses han acumulado «demasiadas situaciones en contra» y que espera que la suerte cambie, e insistió en que «el juego de la segunda parte ante el Alavés es la base de la confianza del equipo para Mallorca».
El técnico, que destacó el buen trabajo de los jugadores durante esta semana, dijo que lo importante para el partido del domingo «es dominar el centro del campo» y se quejó de que el equipo ha cometido en las últimas jornadas demasiados penaltis.
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