Mateu Alemany, consejero delegado del Mallorca, en una imagen captada en el transcurso de la rueda de prensa. Foto: JOAN TORRES.

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El nombre de Fernando Vázquez engrosa ya la enorme lista de entrenadores que han ocupado el banquillo del Real Mallorca a lo largo de 84 años de fútbol. Desde hace unas pocas horas aunque oficialmente condicionado a un simple formulismo "su contrato expira el 30 de junio" el gallego ha pasado a formar parte del pasado. El futuro acaricia los 62 años de edad y se llama Luis Aragonés. Su fichaje obedece a una oportunidad histórica para la entidad "según argumentó Mateo Alemany, consejero delegado de la SAD balear" y también ha agotado el ciclo de un entrenador cuya continuidad se daba por hecha desde hace un buen puñado de meses.

No obstante, un ofrecimiento de Pepe Navarro "agente de Aragonés" ha acabado originado un cambio sustancial en el tratado de intenciones del Real Mallorca. El currículo del Sabio de Hortaleza parece haber quebrado la disyuntiva que se creó en los despachos del club y el nuevo proyecto llevará su sello. Mateu Alemany, que citó a los medios de comunicación para otorgar oficialidad a la llegada de Luis Aragonés y a la salida de Fernando Vázquez, subrayó en su exposición que «nunca llegamos a pensar que un técnico como Luis pudiera entrenar al Mallorca, siempre lo hemos asociado a equipos grandes, pero cuando hemos tenido la oportunidad el club ha reflexionado y ha consumado un hecho histórico. Si no, Vázquez hubiera sido el entrenador. No ha sido una decisión fácil».

El ejecutivo bermellón explicó que el club no había alcanzado ningún acuerdo económico con Fernando Vázquez y que existían «discrepancias con la duración y cantidades que pedía su agente, aunque lo más probable es que hubiéramos alcanzado un acuerdo». Alemany relató que «hace diez días nos pusimos en contacto con el representante de Vázquez y el jueves pasado formalizamos una propuesta concreta. No recibimos ninguna respuesta y surgió la posibilidad de fichar a Luis Aragonés. El club reflexionó y decidió aprovechar una oportunidad histórica. El acuerdo ha sido rápido y fácil. No hay nada firmado, pero su palabra nos vale».