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El Barcelona jugaba en dos campos para intentar desesperadamente clasificarse para la segunda fase de la Liga de Campeones, ya que debía vencer al Besiktas turco en el Camp Nou y, a su vez, que el Milán derrotase al Leeds. Los barcelonistas cumplieron sobradamente su cometido al derrotar por 5-0 al Besiktas, pero el Milán no pudo pasar del empate en San Siro ante el Leeds (1-1).

Por tercera vez en los últimos cuatro años, el Barcelona ha quedado eliminado a las primeras de cambio, en el nefasto para sus intereses mes de noviembre.

La disputa de la Copa de la UEFA será ahora el consuelo menor para los azulgranas, que centrarán sus objetivos en la consecución de este título, junto con la Liga española y la Copa del Rey. La Copa de la UEFA está algo devaluada desde que la Liga de Campeones la disputan varios equipos de los principales campeonatos, en lugar de sólo los campeones, pero ello no le impide seguir siendo un título importante y atrayente, teniendo en cuenta también que ha desaparecido la Recopa y que los ganadores de las copas nacionales disputan ahora la UEFA.

Al igual que el Barcelona, otros terceros de grupo en la primera fase de la Liga de Campeones pasarán a disputar la Copa de la UEFA, como es el caso del Bayer Leverkusen y el Hamburgo alemanes, el Olympiakos griego, el Glasgow Rangers escocés o el PSV Eindhoven holandés.