Miquel Alzamora23/07/01 0:00
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La pretemporada que esta realizando el Mallorca en Kössen está empezando a pasar factura a ciertos futbolistas. Ayer, el primer día de entrenamiento duro, Krauss planificó una jornada con tres sesiones preparatorias. La primera tuvo lugar a las 8 de la mañana y se prolongó por espacio de algo más de media hora. La plantilla realizó carrera continua en el circuito situado junto al hotel y los futbolistas completaron una sesión de aproximadamente 4.000 metros. Tras el desayuno y, más concretamente a las once de la mañana, tuvo lugar la segunda sesión y fue ahí donde algunos jugadores empezaron a notar la dureza del trabajo impuesto por Krauss, concretamente Samuel Eto'o sufrió una ligera contractura y no pudo finalizar el entrenamiento matinal.

Miquel Soler también tuvo molestias musculares en uno de sus gemelos y al igual que el camerunés tuvo que abandonar el trabajo antes que el resto de jugadores. Por otra parte, Albert Luque tuvo que ser asistido por el fisio Joan Antoni Martorell ya que padeció las clásicas ampollas en los pies que le impedían ejercitarse con normalidad. Sin embargo, ninguno de estos jugadores tiene dolencias importantes y todo se limita a intentar asimilar el inicio de un trabajo muy duro en Kössen y que debe servir para llegar en buen estado físico al primer partido oficial que tendrá lugar el día 7 o 8 con la disputa de la previa de la Liga de Campeones.

A estos primeros problemas musculares hay que unir también la baja de Vicente Engonga, que sigue entre algodones sin ejercitarse con el resto de futbolistas, ya que intenta recuperarse de una tendinitis en su tobillo derecho. Miquel Angel Nadal, por su parte, evoluciona muy bien de la operación de rodilla a la que fue sometido al final de la liga y es previsible que, a mediados de esta semana, empiece a ejercitarse con todo el grupo.

Bernd Krauss no quiere dejar nada a la improvisación y ayer por la tarde el equipo volvió a entrenar por tercera vez el mismo día. El toque de balón se combina con el trabajo físico con el objetivo de que el Real Mallorca este lo más conjuntado posible al término de la pretemporada y no se repita lo que ocurrió hace dos temporadas cuando el Molde echó fuera al equipo balear de la Liga de Campeones.