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Miguel Luengo - MELBOURNE La estadounidense Monica Seles venció por primera vez a su compatriota Venus Williams en siete encuentros y se clasificó para disputar las semifinales del Abierto de Australia de tenis contra la suiza Martina Hingis. Seles se impuso a la mayor de las Williams por 6-7 (4-7), 6-2 y 6-3 en una hora y 57 minutos, con poderosos golpes que pueden hacer cambiar de opinión al chileno Marcelo Ríos, quien asegura todavía que el tenis femenino es de chiste, y Hingis derrotó a la italiana Adriana Serra Zanetti, por 6-2 y 6-3 en una hora y 13 minutos, en una jornada en la que de nuevo el techo corredizo de la pista central estuvo cerrado.

En el cuadro masculino, Thomas Johansson resolvió a su favor el quinto duelo sueco en la historia de un Grand Slam al vencer a su compatriota Jonas Bjorkman por 6-0, 2-6, 6-3 y 6-4, mientras que el checo Jiri Novak se impuso al austriaco Stefan Koubek, por 6-2, 6-3 y 6-2. Los dos ganadores se enfrentarán en semifinales. Monica Seles recordará este partido para siempre. Jugó con fiebre, debido a un principio de gripe, fue su primer duelo contra Venus Williams en un torneo del Grand Slam y acabó con victoria.

Pero también es cierto que la campeona de Wimbledon y del US Open jugó lesionada, con una tendinitis en una rodilla y con un problema muscular en la parte inferior del glúteo derecho, que se produjo en el séptimo juego del partido y que le obligó a parar en el siguiente. Venus Williams regresó después de recibir tratamiento y a pesar del dolor se hizo con el primer set en el desempate gracias a su gran servicio (en total consiguió 15 «aces», uno de ellos a 190 kilómetros por hora). Pero su movilidad no era la adecuada y Seles marcó la pauta con potentes golpes desde el fondo para romper cuatro veces el servicio de su rival y hacerse con las dos siguientes mangas gracias a los 49 errores no forzados de Venus.

Hingis, que lleva sin conseguir un título del Grand Slam desde que conquistó su tercera corona aquí en 1999, necesitó calmarse y destrozar una raqueta para que su juego adquiriese su potencia habitual. Serra Zanetti se había convertido en la primera italiana en la historia en alcanzar los cuartos de final de este Grand Slam, y recordaba que siendo aún unas crías, con 14 y 10 años respectivamente, se habían medido en su época júnior, y a pesar de contar cuatro años menos la suiza le había vencido. La italiana planteó más problemas a la suiza que las anteriores rivales, con largos intercambios desde el fondo aunque Hingis terminó dominando.