Miquel Alzamora01/05/02 0:00
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Tomeu Llompart empezó a rehabilitar ayer el entorno del Real Mallorca. El hecho de ser un hombre de la casa, que conoce por donde pisa como nadie y que además cuenta con el respeto de todos dentro y fuera del club, hace que la situación deportiva, si bien continúa siendo dramática, se haya teñido de un moderado optimismo.

El nuevo técnico del primer equipo reconoció que la situación es «complicada» pero no dudó en asegurar que se puede salir de esta situación ya que dispone de un plantilla «con oficio y calidad». Tomeu es savia nueva para un vestuario que mayoritariamente no creía en Kresic ni en su sistema y el hecho de ser un hombre que mantiene una cordial relación con todos los jugadores, hace que, pese a faltar dos partidos y a no depender de uno mismo, se empiece otra vez de cero en esta Liga. «Hay que tener confianza y fe en lo que tenemos que hacer. Cierto es que no hay tiempo para inventar cosas y lo que hay que hacer es simplificarlas y no marear a los futbolistas. Con fe, ilusión y disciplina dentro del campo podemos sacar todos esto adelante», manifestó Llompart.

El entrenador intentará dotar al equipo de un influjo mucho más positivo que el actual, pero reconoce que sería un error cambiarlo todo de un plumazo. «Algo cambiaremos "dijo Tomeu" pero no podemos romper todo el casco del barco, hay que ir parcheando. Hay que ser sensatos y unir esfuerzos. La unión y la disciplina dentro del terreno de juego hacen que un equipo sea fuerte y esté seguro», comentó el preparador de Inca.

Sobre el próximo encuentro ante el Real Madrid, el técnico no quiere bajo ningún concepto que el equipo salga derrotado antes de empezar el partido. «El Mallorca sabe cómo ganar en el Bernabéu, lo ha hecho otras veces y vamos a intentarlo de nuevo con todas nuestras fuerzas», apuntilló Tomeu. Inevitablemente, en la presentación de ayer se le preguntó por su última experiencia en el banquillo del Mallorca, experiencia que fue muy positiva ya que con él se logró el ascenso a Primera División. «Antes el objetivo era el ascenso de categoría ahora hay que buscar la salvación y creo que es posible», comentó. «Lo importante es tener orden y desterrar la tristeza. Todos tenemos que hacer un último esfuerzo y trabajar con alegría y fe», comentó. Por último Llompart quiso dejar claro que «los jugadores son conscientes de lo que hay en juego» para insistir en que «soy un hombre de empresa y acepto las decisiones de mi empresa. Estoy dispuesto a afrontar este reto y también estoy capacitado para llevar a cabo este trabajo», concluyó Tomeu Llompart en la mañana de ayer.