El Mallorca se enfrentó a la Selección del Tirol y consiguió ganar por ocho a cero. Foto: J.TORRES.

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8 REAL MALLORCA: Miki, Poli, Viale, Campano, Buades, Ibagaza, Soler, Lozano, Novo, Merino y Güiza.
En la segunda parte jugaron: Alberto, Niño, Miquel Soler, Olaizola, Díaz, Robles, Marcos, Raúl, Riera, Tuni y Biagini.
0 SELECCIÓN DEL TIROL: Simon, Goran Helmut, Günther, Thomas I, Thomas II, Mathias Lindenthaler, Christian, Egger y Heim.
En la segunda parte jugaron: Christian, Raina Wechsleberger, Goriupp, Harry, Zelco, Zenc, Klotz, Enthofer, Thomas y Sollath.
Àrbitro: Kopp Michael. No mostró cartulinas.
Goles:
0-1, minuto 18, Poli.
0-2, minuto 21, Güiza.
0-3,minuto 23, Gúiza.
0-4, minuto 26, Güiza.
0-5, minuto 52, Raúl.
0-6, minuto 56, Tuni.
0-7, minuto 60, Biagini.
0-8, minuto 72, Robles.

Miquel Alzamora - Jenbach
El Real Mallorca goleó en su primer partido de preparación en el stage de Austria y no tuvo ningún problema para imponerse a una pobre selección del Tirol que, en ningún momento fue rival para los de Gregorio Manzano. La entidad bermellona quería iniciar los partidos amistosos ante un equipo sin nombre y que no diera ninguna opción y así fue. Los rojillos dominaron de principio a fin y cuando Poli, en el minuto 18 abría el marcador, el combinado tirolés se vino totalmente abajo y los bermellones, con la primera puesta y sin esforzarse más de la cuenta fueron marcando goles hasta llegar a ocho.

Daniel González Güiza, con tres tantos, se convirtió en uno de los grandes protagonistas del partido y prácticamente él solo dejó sentenciado el partido antes de llegar al tiempo de descanso. Manzano alineó a dos equipos diferentes en el primer y segundo tiempo y sólo estuvieron ausentes los jugadores con molestias o que todavía no tienen el mismo ritmo que el resto.

La segunda mitad, pese a cambiar totalmente de equipo fue un calco de la primera y el dominio isleño fue total y absoluto. Raúl Martín, Tuni, Biagini y Robles marcaron los goles y completaron los ocho. Manzano dispuso en los dos tiempos del clásico 4-4-2 al que tanto él como la plantilla está acostumbrado a jugar y entre esto y la endeblez del rival la goleada fue mayúscula. Un dato técnico a destacar fue la posición que ocupó Miquel Soler en el segundo tiempo. El futbolista actuó de central mientras que Díaz se situó en el lateral izquierdo. Al final no puede tomarse este partido como muestra para intentasr explicar el potencial del equipo mallorquinista. Será mañana en el partido que enfrentará al Mallorca ante un rival de entidad como es el Fenerbahce, subcampeón de la Liga turca.