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Los protagonistas de dos de los capítulos más suculentos de la historia del deporte mallorquín se dan cita a bordo del «Retevisión». Dos oros olímpicos y una lista de victorias complicada de enumerar marcan la trayectoria deportiva de Jordi Calafat y Pepote Ballester, los artífices de que el «Retevisión» esté llamado a ser uno de los barcos más a tener en cuenta en la presente edición de la Copa del Rey.

Calafat mostró la senda de la gloria al olimpismo balear cuando, junto a Kiko Sánchez Luna, se convertía en el primer regatista nacido en Mallorca que escuchaba desde lo más alto del podio de unos Juegos Olímpicos el himno nacional. La clase 470 les había recompensado en la mágica cita de Barcelona'92, para que cuatro años después, Pepote Ballester completara la jugada en Tornado al otro lado del océano, en Atlanta'96.

El adiós a la vela ligera estaba cantado, y ahora Calafat ha asumido el mando del «Retevisión». Desde el puesto de patrón, bajo la atenta mirada de Jan Santana y con Pepote como fiel escudero, Jordi tiene la misión de colocar a su Sinergia 40 entre la élite. «Esperamos luchar por estar arriba. Aspiramos a meternos entre los cinco primeros, pero ganar o no es cuestión de que todo te salga bien o no durante la semana» significa un Jordi Calafat prudente y que apela «a la regularidad y el saber hacer» para estar el domingo sobre la tarima del Real Náutico de Palma.

Con el décimo aniversario de los Juegos de Barcelona presente día a día, uno de los veintidós oros del equipo español tira de la nostalgia para echar la vista atrás. «Ese acontecimiento cambió radicalmente mi vida. Desde Seúl se inició un proyecto ambicioso que marcó un antes y un después y que no debe estancarse», comentó el patrón del «Retevisión». Uno de los refuerzos de lujo de la embarcación diseñada por Marcelino Botín no es otro que el anteriormente mencionado Pepote Ballester. El regatista del Port de Pollença se vio seducido por el proyecto, «no sólo por la presencia de Jordi y la gran temporada que están completando. Las velas Quantum han ayudado a completar un bloque perfecto y sin límites».

El cartel de favorito que se le presupone al «Banco Espirito Santo» no es compartido por Pepote, «y menos el primer día. Al menos yo empiezo a hacerme una idea con la regata en plena marcha, sobre la segunda jornada. Una semana es muy larga», destacó el regatista, que tampoco quiere aventurar un pronóstico sobre el «Retevisión» hasta observar el devenir de las pruebas. Pese a todo, dejó ver cuáles son sus claves para evitar un triunfo extranjero o ajeno a su embarcación, opción que tiene su peso ante la numerosa participación en la regata. «Hay que mantener la tranquilidad en los momentos más complicados y esperar que la justicia esté de tu lado cuando las situaciones sean un poco comprometidas», apuntó el deportista olímpico en Sydney.

Inmersos en el proyecto Madrid'2012 y la subsede de vela palmesana, Ballester tiene mucho que decir. «Es más, la Copa es una buena manera de promcionar nuestra Bahía, aunque ésta no sea precisamente una regata olímpica». Ahora será el campo de regatas el que decida.