El delantero prefiere irse con la carta de libertad bajo el
brazo y su técnico, Fatih Tehrim, aduce que no jugará ante el
Barcelona a causa de su precario estado físico. El entrenador, tal
vez presionado por los directivos, ha ensayado durante toda la
semana con el brasileño Christian Correa en la posición de Sas,
mientras que la otra estrella del equipo, Arif Erdem, será el
segundo punta. El Galatasaray, que ha descansado durante toda la
semana, ya que la Federación turca decidió aplazar el encuentro
liguero ante el Fenerbahce, jugará con un clásico 4-4-2.
El colombiano Mondragón estará en la puerta; mientras que Sarr,
Bulent, el mexicano Almaguer y Hakan Unsal formarán la defensa;
Umit Davala, los brasileño Batista y Felipe, junto con Ergun
formarán en la medular y Arif y Christian son los delanteros. El
Barcelona llega a Estambul con conocimiento de causa. Sabe lo
complicado que es ganar en el Alí Sami Yen, porque el año pasado se
ganó su clasificación para la siguiente ronda en uno de los
terrenos de juego europeos más complicados.
Si Frank de Boer se recupera de sus molestias musculares, Van
Gaal alineará a su once tipo. No habrá variación alguna, máxime
cuando la única posibilidad de cambio que se atisbaba en el once
titular -la entrada de Juan Román Riquelme por Thiago Mottano se
producirá debido a la lesión en la zona miotendinosa de los
isquiotibiales del argentino que se ha tenido que quedar en
casa.
El espectacular estado de forma de Luis Enrique, la gran
confianza ganada por Patrick Kluivert tras estrenar su cuenta
goleadora y el gran rendimiento ofrecido por Javier Saviola serán
los principales argumentos ofensivos, aunque al final todo estará
en función de si Xavi Hernández es capaz de producir el suficiente
caudal de fútbol.
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