Gregorio Manzano empieza a manejar un catálogo de delanteros algo
más extenso. Atizado por las lesiones y las sanciones, el Mallorca
se ha encontrado huérfano de atacantes desde que inició la
pretemporada, porque Luque era antes la única referencia y hasta
ahora lo ha sido Pandiani. El regreso de Samuel Etoo a la actividad
se ha convertido en una «alegría» para el técnico jienense porque
«ahora vamos a tener más alternativas», después de que Güiza fuera
cedido al Recreativo y de que Biagini y 'Turu' Flores cayeran
lesionados.
Lejos de suponer un contratiempo "el equipo viene de ganar en
Bilbao" la irrupción del africano supone para Manzano un alivio
porque «los buenos jugadores tienen cabida siempre», según subrayó
ayer el técnico mallorquinista. «Es una alegría recuperar a Etoo,
lo será poder contar con Lussenhoff o con Vicente..., es lo que
estábamos deseando. Por eso no supone un problema su regreso»,
enfatizaba Manzano.
A medias entre la euforia tras el triunfo ante el Athletic y la
ilusión por recuperar al camerunés («nadie va a descubrir ahora su
enorme calidad»), el técnico rojillo quiso dejar claro que «a estas
alturas, cuando todavía quedan cuatro entrenamientos por delante,
no nos hemos planteado si va a jugar o no el domingo ante el
Espanyol. No quiero adelantar nada porque todavía hay que estar
pendiente de su evolución y de todas las circunstancias que le
rodean. De todas formas, siempre es positivo recuperar a
futbolistas de ataque cuando se aproxima un partido que lo juegas
en tu estadio».
Interrogado sobre si prefiere confiar en los mismos jugadores
que actuaron en Bilbao o buscarle un hueco a Etoo, Gregorio Manzano
dijo que «lo que vamos a intentar es buscar un equilibrio en el
equipo. Sabemos que tenemos un jugador más para utilizar y eso es
bueno, pero no me voy a pasar toda la semana haciendo cábalas. Hay
que tener tranquilidad», explicó el entrenador.
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