El filial se oxigena a costa de la Gramanet (1-0)

Fernando Fernández
El líder no estuvo a la altura de las circunstancias y se atascó ante un Mallorca B que supo sacar partido de su mayor rodaje en un terreno de juego de excesivas dimensiones para los catalanes. Los sumados ayer son tres puntos de gran valor para el vestuario mallorquinista, que da un salto cuantitativo en la tabla y suma su segunda victoria consecutiva en el Lluís Sitjar.

Las oportunidades más claras fueron para el filial balear, que fue de más a menos y supo contener los escasos y anárquicos ataques de la Gramanet. El que fuera rival copero del primer equipo no demostró su condición de conjunto imbatido y consumó su primer traspiés en el presente curso.

Amate y Tuni fueron los primeros en poner a prueba los inestables cimientos defensivos de los catalanes, que aparecían de forma testimonial en el encuentro merced a un envenenado testarazo de Matute que hacía a Miquel Àngel Moyà emplearse a fondo.

Pero fue a pelota parada como llegaron algunas de las acciones de más peligro para los hombres de Tomeu Llompart. En esa faceta, Amate y Ramis, pero en especial el segundo, demostraron combinar potencia y colocación en sus piernas. Ramis lo probó en dos lanzamientos, aunque Morales pareció haberle tomado la medida al defensor.