El Constància ha despegado. El conjunto inquense ha asumido el
liderato en solitario del grupo balear de tercera y parece lanzado
en la carrera por las primeras posiciones. Los resultados han dado
volumen al proyecto de Jaume Bauçà y el último compromiso liguero
ha supuesto el impulso definitivo en la tabla.
El plantel inquense sufrió este verano una renovación de la que
comienzan a surgir los primeros frutos. El equipo se reforzó
cuidadosamente, seleccionando sus incorporaciones y sobre el
terreno de juego ha expuesto la calidad necesaria como para
oficializar su candidatura al título.
Jugadores como Ramis o Pepe Luque, que cuentan con experiencia
en categorías superiores, han fortalecido una plantilla que en el
curso pasado dejó una buena imagen y que este año va camino de
afrontar metas superiores. El inicio está siendo inmaculado "en
diez partidos solo ha cedido dos empates" y la última cita del Nou
Camp d'Inca supuso una nueva alegría para la hinchada
albinegra.
La visita del Poblense, además de la rivalidad que llevaba
implícita, mostró otra versión positiva del cuadro de es Raiguer,
aunque será en el próximo partido cuando se pueda apreciar una
muestra real del pulso que mantienen Constància y Vilafranca. Los
hombres de Bauzà visitaran el domingo los dominios del equipo
verdiblanco en el choque apasionante.
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