Los jugadores del Real Mallorca vuelven a tener la oportunidad, una
semana más, de ser líderes de Primera División. Los números son
sencillos pero la ejecución se presume más complicada. El once
rojillo, para ser primero, debe ganar al Deportivo y esperar que la
Real Sociedad, que juega en Anoeta a las siete de la tarde ante el
Barça pierda o empate.
Sin embargo, los futbolistas del Mallorca no viven obsesionados
con esta cuestión y en su mente sólo está el ganar. «Pensamos en
seguir sumando puntos -dijo Olaizola- lo demás es una consecuencia
de los partido que vas ganando», comentó el capitán mallorquinista.
La plantilla continúa con los pies en el suelo, evita caer en la
euforia y si finalmente se da la combinación necesaria para ser
líderes, será un «orgullo para todos», apuntó el defensa vasco.
La Real Sociedad es, una semana más y van ya cinco consecutivas,
líder de Primera pero el Mallorca es la gran amenaza durante las
dos últimas jornadas. Hoy puede haber un cambio en la cima de la
clasificación pero, como avisa la plantilla mallorquinista, «a
estas alturas de Liga estar líder no deja de ser una anécdota»,
manifestó Olaizola. El reto, sin embargo, es del todo
atractivo.
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