La victoria es el único resultado que le vale a un Drac Inca que
afronta una semana de vértigo. Esta tarde (18:30 horas) y el
próximo fin de semana ante el Rosalía, Xavi Sastre y sus hombres se
juegan el grueso de la temporada y sus opciones de esquivar las
eliminatorias por el descenso. Observando la trayectoria del Drac
Inca como local desde la llegada de Sastre al banquillo del Palau,
y teniendo en cuenta que los onubenses aún no saben lo que es ganar
lejos de su cancha, el pronóstico es claramente local.
A todos estos factores que juegan a favor de los mallorquines se
une el hecho de poder contar con la totalidad de sus efectivos.
Todo ello, y en ambiente intimidatorio del Palau d'Esports
convierten al Ciudad de Huelva en la mejor víctima para dar un paso
más hacia la tan perseguida tranquilidad. El rival de turno no
llega en su mejor momento, acumulando siete derrotas en los ocho
últimos encuentros disputados. Antonio Bioque tan sólo cuenta con
la baja de Gonzalo Àvila, quien sufre una lesión de muñeca que le
impide estar ante Drac Inca en un momento delicado.
La que fue la segunda peor defensa de la historia de la LEB a la
conclusión de la primera vuelta ha experimentado una ligera
mejoría, pese a que la rehabilitación se presume como algo utópico.
Lo único que Drac Inca debe tener claro es que ganar es la consigna
que debe manejar con holgura si no quiere complicarse la existencia
en la categoría.
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