El Atlético de Madrid ha abonado al Real Mallorca los tres millones
de euros (500 millones de pesetas) que le adeudaba en concepto de
los traspasos de Germán Burgos y Armando Alvarez. Tal y como
adelantó Ultima Horael pasado 31 de diciembre de 2002, existían
unos pagarés con vencimiento a final de enero en los que la entidad
colchonera debía pagar una parte importante de la operación de
venta de los dos futbolistas y que estaba vinculada al ascenso del
Atlético a Primera, situación que se produjo en mayo de 2002.
Ahora, finalizada la prórroga y después de que los rojiblancos
hayan firmado un acuerdo con Audiovisual Sport por los derechos
televisivos y que les reportará 16 millones de euros por temporada,
se ha saldado la deuda.
El Mallorca traspasó a Burgos y Armando al Atlético el pasado 7
de julio de 2001 en una operación que ascendió a cerca de 5
millones de euros (800 millones de pesetas). El club isleño pactó
con el madrileño una cláusula por la que percibiría 1.8 millones
adicionales si el equipo de Luis Aragonés ascendía a la máxima
categoría, algo que finalmente se produjo. Fue entonces cuando el
Atlético solicitó una prórroga para abonar este pago y entregó unos
pagarés al Mallorca que vencían el 31 de enero de 2003. Miguel
Angel Gil Marín, director general del conjunto colchonero,
suscribió el pasado martes un nuevo contrato para las tres próximas
temporadas con Audiovisual Sport, por lo que ayer tenía previsto
saldar las deudas con Mallorca, Málaga, Las Palmas y Boavista, así
como con la plantilla rojiblanca, a la que se le debe la
mensualidad del mes de diciembre.
El pago de los 3 millones de euros va a suponer una inyección
económica para el club mallorquín, que también tiene en su poder
unos pagarés del Deportivo de la Coruña derivados del traspaso del
delantero Albert Luque.
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