NACEX JOVENT (23+20+7+17): Samper (6), Yepes (8), Donaire (14), Picallo (12), Jábega (8) -cinco inicial-.
También jugaron Juanes (8), Macu Rosselló (5), Pecos (2) y Fernández (4).
15 de 21 en tiros libres, 17 de 36 en tiros de dos y 6 de 20 en tiros de tres. 29 rebotes (5 ofensivos y 24 defensivos) y 19 faltas personales.
BF VILADECANS (19+18+18+18): Tarrasón (12), Braise (17), Mohedano (1), Viñuela (21), Soler (6) -cinco inicial-.
También jugaron Funés (6), Pascual (0), Planas (4), Montolio (0), Hidalgo (4) y Bolaños (2).
14 de 19 en tiros libres, 25 de 49 en tiros de dos y 3 de 19 en tiros de tres. 42 rebotes (16 ofensivos y 26 defensivos). 17 faltas personales.
Àrbitros: Óscar Bardaji (catalán) y Joan Gil (balear). Sin eliminadas.
S.R.C.
El Nacex Jovent acusó en la segunda parte la ausencia de Sandra Peña y los problemas de Sonia Juanes con su tobillo. El BF Viladecans aprovechó un parcial de 2-12 en el comienzo del tercer cuarto para volcar el resultado y resistir el ataque de las jugadoras de As García, donde Elsa Donaire volvió a ser la mejor jugadora del encuentro junto con la catalana Viñuela y la francesa Braise. El dominio bajo los tableros que mostraron las catalanas, sobre todo en los rebotes ofensivos (5 contra 16), posibilitó que consiguieran segundas y terceras opciones, pese a topar con la oposición de Donaire, que capturó hasta once balones.
Comenzó el partido con una ligera ventaja del Viladecans, que se puso 2-8 en el electrónico del polideportivo Germans Escalas. La entrada de la júnior Esther Fernández en sustitución de Vanessa Picallo -ya con dos personales-, produjo una sensación de alivio y fue el punto de partida de la reacción local. En el tiempo de descanso, las mallorquinas ya habían impuesto sus credenciales y se marchaban a los vestuarios con un 43-37 en el bolsillo.
Después de veinte minutos de agradables sensaciones y buen juego, un tiempo de juego muy desacertado y un parcial de 2-12 en contra facilitaron que el quinteto catalán pasara a dominar sobre la cancha y en el resultado. En la recta final de la confrontación, dos certeros lanzamientos de Tere Pecos acercaron al conjunto de sa Indioteria a dos puntos (67-69), cuando únicamente restaban 26 segundos por disputarse. El Viladecans, principalmente por medio de Viñuelas y Braise, no perdió los nervios y demostró la enorme sangre fría que reside en sus filas. El equipo visitante evidenció entonces por qué está en la tercera plaza de la categoría y mantuvo el control.
Las dos bases de las mallorquinas, Laia Samper y Macu Rosselló, realizaron una mejor dirección que en los últimos enfrentamientos, pero en la lucha en el juego interior se notó en exceso la falta de una jugadora con las características de Sandra Peña. A pesar de la derrota y el mal sabor de boca, las palmesanas han conseguido el objetivo que se marcaron: la permanencia por un año más en esta exigente Liga Femenina-2.
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