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Elena Gómez continúa deslumbrando y ayer sumó dos nuevas medallas en la prueba de la Copa del Mundo de gimnasia artística disputada el pasado fin de semana en Cottbus (Alemania). La gimnasta mallorquina se colgó la medalla de plata en la modalidad de suelo y la de bronce en barra. En la jornada del sábado Elena logró el segundo puesto compartido con la ucraniana Alina Kozich en paralelas.

La jornada del sábado proporcionó una importante dosis de tranquilidad a Elena Gómez. En París falló con su nuevo ejercicio en paralelas y no logró meterse en la final, sin embargo en Cottbus las cosas cambiaron. Realizó a la perfección su ejercicio y subió al podio.

Esa medalla aportaba tranquilidad a la mallorquina que evidenció de nuevo su superioridad en el suelo. Logró el primer puesto en la final con una nota de 9.562 puntos, pero las normas en la cita germana son distintas a las del resto de las pruebas de la Copa del Mundo. En Cottbus las dos mejores gimnastas de la final repiten de nuevo su ejercicio para conocer a la ganadora de la prueba. Elena Gómez tuvo que competir por el primer puesto con la rusa Anna Pavlova y todo se le puso en contra. La música no funcionaba y cuando los organizadores lograron conectar la cinta, la canción entró con retraso. En la segunda serie de piruetas Elena tuvo un desequilibrio y cedió la medalla de oro a Pavlova.

La nota de Elena en la final fue de 9.562 puntos y será la que haga promedio para la clasificación a la final de la Copa del Mundo por lo que mantiene la primera posición en la modalidad de suelo, ya en solitario tras despegarse de las gimnastas brasileñas.

La participación de Elena Gómez en Cuttbus se completó con la medalla de bronce lograda en la prueba de barra. Sólo tres gimnastas lograron superar el nueve. Anna Pavlova fue la ganadora con una nota de 9.475, mientras que Oana Ban logró un 9.325. La mallorquina obtuvo un 9.237, nota que le permite recuperar la confianza en sí misma y volver a ser ambiciosa en un aparato al que también pretende sacarle un gran rendimiento.

Jesús Carballo declaraba tras finalizar la competición que «estamos muy contentos porque conseguir tres medallas en una prueba de la Copa del Mundo no es nada fácil». El seleccionador nacional valoró muy positivamente la medalla en las paralelas porque «a Elena le ha servido para disipar el pequeño trauma de París. Es un ejercicio muy fuerte y se ha sabido adaptar. Nuestro objetivo es que todas las notas de Elena superen el nueve».

Elena Gómez no va a tener mucho tiempo para descansar que el próximo fin de semana participa en el encuentro internacional que medirá a Inglaterra y España que se celebrara en Londres. Jesús Carballo va a desplazar a siete gimnastas, aunque la única mallorquina que viajará es la campeona del mundo. Raquel Pascual todavía se encuentra en periodo de recuperación de su rodilla.